Es fácil hablar sobre la filosofía de vida, de lo que está bien o mal, y lo que se debe hacer o no en una situación. Todos sabemos que debemos arrepentirnos si cometemos un error y que debemos perdonar cuando nos atacan, sin embargo, es demasiado difícil hacerlo.
El pastor Karl Sisson conmovió a toda Australia con un acto de compasión que pocos han tenido la suerte de ver; perdonó al asesino de su hijo.
Josiah Sisson fue atropellado en Nochebuena mientras observaba los fuegos artificiales junto a otros amigos. Tenía solo nueve años.
Adrian Murray, de 24 años, iba conduciendo bajo los efectos de ciertas sustancias y, al perder el control del auto en una curva, terminó quitándole la vida al niño. Luego impactó con una casa.
Karl, el padre de Josiah, fue invitado a presenciar el primer juicio de Murray, pero durante la ceremonia todos quedaron impactados con lo que sucedió.
El pastor abrazó al asesino de su hijo y lo perdonó de todo; lo liberó de toda culpa. Ambos se pusieron a llorar y las imágenes conmovieron a todos en Brisbane y al país entero.
Murray deberá regresar a la corte el 14 de febrero para conocer su sentencia, pero al menos cuenta con el honesto e increíble perdón del padre de su víctima.
