Apuntaladas por la escasez de terrenos para construir edificios en el centro posadeño, los precios de casas abandonadas o que no están ocupadas se dispararon y hoy están pidiendo hasta medio millón de dólares por una de estas viviendas que en algunos casos tienen más de 50 años.
El boom de la construcción de torres en la ciudad de Posadas está generando una burbuja inmobiliaria en los precios de los terrenos, tanto dentro de las cuatro avenidas como en zonas privilegidas de la ciudad, como lugares estratégicos de la Costanera.
La mayoría de las casas que están en desocupadas dentro de las Cuatro Avenidas, tienen cotizaciones tan altas que sólo se pueden amortizar si quien las compra luego está dispuesto a hacer un edificio.
Para los desarrolladores, los números no cierran y el resultado son operaciones que no se concretan y cada vez más casas con el cartel de venta.
«A nosotros nos están ofreciendo al menos dos terrenos por semana, pero en muchos casos los precios están fuera de los parámetros, hoy se puede pagar hasta 650 o 700 dólares el metro cuadrado por un terreno, que muchas veces tiene una casa que hay que derrumbar», explicó Guillermo Vázquez, de la desarrolladora Consultora Misionera, que construye varios edificios en la ciudad, como las torres Aymará.
Vázquez y otros operadores inmobiliarios consultados coincidieron que en Posadas está sucediendo lo mismo que ocurrió en Palermo y otros barrios de Buenos Aires, cuando el boom de las torres disparó los precios de las propiedades y se fue produciendo un éxodo de familias que liquidaban sus casas y se mudaban a otros lugares de la Capital.
Incidencia del terreno
En la calle Bolivar entre 3 de Febrero y 25 de mayo, por ejemplo, una casa que no está ocupada se vende por 420.000 dólares, en la inmobiliaria que la ofrece explicaron que «el precio era de 480.000 y ahora se decidió bajar un poco».
El terreno tiene una dimensión reducida de apenas 10 metros y 80 centimetros de frente, pero tiene 45 metros de largo. Lo cual arroja un costo apenas inferior a los 1000 dólares por metro cuadrado.
En ese terreno, por ejemplo, se pueden llegar a construir 45.000 metros cuadrados, en un edificio de aproximadamente 10 pisos.
En general, los desarrolladores pagan estas casas o terrenos con metros cuadrados que luego entregan a los propietarios.
«Muchos están pidiendo demasiado, creo que hay una distorsión producto de que hubo tasadores que no hicieron bien su trabajo, no los asesoraron bien en el afán por ganar un cliente y prometieron precios que el mercado no puede afrontar», dijo Vázquez.
«Hay terrenos que tienen limitaciones y no se puede construir en frentes chicos con cochera, después hay que tener otros parámetros en cuenta, como la ubicación respecto al río, si da el sol», explicó el experto.
Todo esto se da en un contexto donde el mercado inmobiliario se mueve con muy bajo volumen de transacciones.
MB
EP
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