La Nación se comprometió a agilizar pagos a forestales e incluir más madera en la construcción

La subsecretaria de Desarrollo Foresto-industrial del Ministerio de Agroindustria de la Nación, Lucrecia Santinoni, indicó que el presidente Macri firmó un decreto para liberar los 115 millones de pesos que faltan para cumplir con los 265 millones comprometidos este año para la operatoria de la ley de promoción de bosques implantados. Los pagos se concretarán una vez que el ministerio de Economía libere las partidas correspondientes. Dijo además que se firmó un acuerdo para incluir una mayor cantidad de madera en la obra pública.

Santinoni participó de la apertura oficial de la feria Foresta Argentina 2016, que se realizará hasta el domingo en el Parque del Conocimiento de Misiones, en Posadas. La funcionaria aseguró que el Gobierno nacional le reconoce al sector forestal un “enorme potencial de desarrollo” y lo considera un motor de la economía del Nordeste del país.

Señaló que una muestra de ello es el compromiso del propio presidente Macri de destinar este año 265 millones de pesos a aportes no reintegrables en el marco de la ley de promoción de bosques implantados (ex 25.080), 165 millones más que lo originalmente presupuestado para este año. Reconoció que la operatoria de pagos viene retrasada, pero aseguró que se cumplirá con la meta de pagar antes de 2017 todo lo correspondiente a este año y de regularizar totalmente los pagos el año próximo.

Remarcó que a principios de septiembre el presidente Macri firmó un decreto para pagar lo último que faltaba del presupuesto de este año: 115 millones de pesos. Reconoció empero que los pagos no se concretarán de manera inmediata sino al ritmo que el ministerio de Economía de la Nación lo vaya autorizando.

Desde el sector forestal advierten que justamente la autorización de pago del ministerio de Economía es el paso que más se demora, por lo tanto recibieron con optimismo el anuncio de Santinoni, pero también con cautela.

La funcionaria afirmó además que la Nación está trabajando en una prórroga de la Ley de Bosques Implantados, cuya vigencia finaliza en 2018. Anticipó que se elaborará un proyecto que tenga como objetivo central la ampliación de la superficie implantada, ya que actualmente hay una sobreoferta de materia prima en el sector –afirmó- sino en una ley que contemple la mejora en todos los eslabones de la cadena foresto – industrial.

“La ley vence en diciembre de 2018. Por lo tanto, ya empezamos a trabajar en cómo se extendería una ley de promoción para el sector, cuál es el alcance que debe tener, cómo se aplicaría la operatoria, que se pueda garantizar un piso de presupuesto, que los fondos estén establecidos por Ley y podamos así independizarnos todos los años de la Ley de Presupuesto. Es necesario lograr mayor fluidez operativa, encontrar otros alcances, otra aplicación, que incluya a la industria. A su vez, que la ley sea un empujón, pero el desafío es encontrar una herramienta sustentable, que ayude a moverse en el negocio inicialmente, pero que la rueda después se mueva sola. Que la actividad no dependa de la inyección externa siempre para poder funcionar”, agregó.

Destacó además que la Nación firmó acuerdos para incrementar el uso de madera en la obra pública,  especialmente en la construcción de viviendas. Explicó que no se apunta principalmente a construir casas de madera sino a ir incorporando piezas de madera, como marcos, puertas o ventanas. No supo dar certezas en relación a cuánto demorarían esos acuerdos en traducirse a demanda efectiva de madera que pueda generar oportunidades de negocios para los industriales de la región.