Una tradicional textil posadeña amenazada por las asimetrías

La tradicional textil posadeña Icaro, lider en la confección de equipos deportivos y uniformes para colegios y fuerzas de seguridad, atraviesa una delicada situación a partir de las fuertes asimetrías con la vecina Encarnación que volcaron a los compradores al otro lado del río Paraná.

La empresa textil tuvo que reducir su personal en los últimos meses de 12 a 6 trabajadores que, incluso, están haciendo turnos parciales. «Las ventas cayeron un 80 por ciento, incluso hasta los uniformes de la policía se van a comprar a Paraguay», explicó Francisco Vera, el fundador y dueño de esta pyme familiar.

Icaro fue fundada hace 20 años cuando Vera, un misionero que trabajaba en una empresa textil grande radicada en Posadas, se quedó sin trabajo tras el cierre de esa firma. Corrían los años 90 y la Argentina se encontraba en pleno auge de las políticas liberales y el cierre de fábricas estaba a la orden del día en todo el país.

A Vera le ofrecieron algunas máquinas en lugar de pagarle la indemnización y así arrancó una historia marcada por el trabajo y el esfuerzo de toda la familia. En Icaro trabaja la esposa y sus dos hijos, a la par del resto de los empleados. Con tesón y esfuerzo fueron construyendo una historia de éxito.

Hace no mucho tiempo Icaro tenía todo para crecer y expandirse fuera del ámbito de la provincia. Incluso, había apostado fuerte transformándose en el proveedor de ropa de Guaraní A. Franco en el regreso del club de Villa Sarita al fútbol grande (B Nacional). Incluso, logró desplazar con ese contrato a empresas multinacionales que tallan fuerte en la segunda división del fútbol argentino.

Sin embargo, hoy la realidad es bien distinta. «Ahora estamos  haciendo uniformes para el colegio, para cuando empiecen las clases el año próximo, pero hay que tener cuidado, porque pronto enfrente pueden tomar los modelos y empezar a hacer también los uniformes de los colegios de acá», advirtió Vera.

Menor presión impositiva

«¿Qué se necesitaría para estar un poco mejor ? Que bajen los impuestos, municipales, provinciales y nacionales. Hoy es imposible competir. Una camiseta marca Hering la traen y acá la pagan 65 pesos. Si compran de a 100 remeras se las bajan a 55 pesos. Nosotros vendemos las remeras arsimilares a 90 pesos y apenas ganamos 15, si compran en cantidad las vendemos a 85 pesos y ganamos todavía menos», graficó el emprendedor textil.

Vera también comentó que tiene facturas a cobrar por parte del Gobierno provincial que están muy atrasadas. «Nos pagan con un retraso de entre 3 y 6 meses, se hace dificil así», cuenta.

El empresario seguirá apostando al trabajo y espera que las condiciones macroeconómicas cambien. «Tienen que controlar mejor también lo que se trae desde Encarnación, pasa cualquier cosa», dice.

MB

EP

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Icaro es fuerte en indumentaria para equipos de fútbol y también uniformes de todo tipo.

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El tradicional local de la firma sobre la calle Uruguay, atrás están los talleres de la empresa familiar, fundada hace 20 años.

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