Unir Posadas con Alaska, el desafío rutero de una misionera y su novio

A bordo de la combi “Aurora”, la posadeña María Lourdes Acuña junto a Francisco, un chubutense que conoció en Buenos Aires, emprendieron un largo viaje hasta Alaska. Salieron el 19 de julio del año pasado y entre tantas escalas ahora están en Nicaragua. “Solo podemos hacer 100 kilómetros por día”, contó Lourdes.

 

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La posadeña María Lourdes Acuña (26) junto al chubutense Francisco Martínez Baroni  (27) llevan más de un año viajando con Aurora, la integrante más importante del pretencioso viaje que decidieron emprender: Unir Argentina con Alaska. Lourdes y Francisco se conocieron en Buenos Aires y son novios. Lourdes se recibió de contadora en el 2014 y Francisco de administrador de empresas al año siguiente. Una vez culminados sus estudios y unidos por la pasión compartida de viajar, se animaron a un desafío que todavía está en marcha.

 

¿Por qué viajan?

Viajar nos permite desatarnos de la rutina, nos permite algo que no tiene precio: libertad. Ser dueños de nuestro tiempo. No queremos que se nos pase la vida estando en un mismo lugar, queremos sentir diferentes climas. Conocer culturas distintas. Viajamos porque queremos ser uno mas en un lugar totalmente diferente al nuestro, queremos sorprendernos con costumbres que desconocemos, adoptar nuevas y eliminar malas.

 

Armados de mucha paciencia y dedicación comenzaron a equipar la combi que se transformó en su casa durante el último año. Aurora es un Volkswagen T2-Microbus, modelo 1982. Para equiparlo tuvieron que vaciar su interior por completo y sacar las alfombras y el techo. Un chapista se encargó de sacar las partes oxidadas que abundaban en las ventanas y puertas de la combi. Una vez terminados los arreglos de chapa, Lourdes y Francisco se encargaron de la pintura. Utilizaron cientos de tubos de aerosol blanco pensando que jamás cubrirían el original color azul marino, pero lo lograron.

EL MOMENTO DE LA PARTIDA (Video difundido por Canal 13)

http://www.youtube.com/watch?v=qy6JqqSbk2I

Como si eso fuera poco, también tomaron el recaudo de aislarla del ruido y la temperatura exterior utilizando membrana aluminizada. Además de equipar su medio de transporte y casa rodante, antes del viaje, Lourdes y Francisco, con ayuda de sus familias, se encargaron de preparar un “stock” de cosas para vender en cada parada, dinero que destinan para continuar viajando.

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Más de un año

El 19 de julio cumplieron un año de viaje y cada detalle del día a día lo vuelcan en un blog que crearon especialmente para relatar kilómetro a kilómetro. De allí se desprende que en 365 días recorrieron 7 países, consumieron 10 kilos  de yerba mate, realizaron 6 cambios de aceite, 89 noches hospedados en casas de familia y  más de 21 mil kilómetros recorridos.

Salieron de Posadas rumbo al norte del país, al principio tuvieron percances con la combi, pero fueron necesarios para aprender a solucionarlos. Descubrieron “las mañas”, los caprichos, las fortalezas y debilidades de Aurora.  Aprendieron a convivir tan bien con ella que los llevó a rincones impensados del mundo y también por su simpático porte colaboró mucho a que las personas se acerquen a preguntar de dónde son, a dónde van, qué venden, colaborando con ellos en la mayoría de los casos de la forma que sea.

Kombiando por América es el nombre de este sueño. Un juego de palabras que define perfectamente el objetivo claro de Francisco y Lourdes: andar en “kombi” por América.

Esta semana arribaron a Nicaragua, disfrutando de la calidez de lugares históricos y playas. Absorbiendo paisajes y belleza que de tanto en tanto comparten con sus seguidores en las redes sociales a través de fotos, crónicas de viaje y videos. “Quizás llame la atención todo el tiempo que llevamos viajando, pero con Aurora sólo podemos hacer alrededor de 100 kilómetros por día”, contó Lourdes.

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