En un breve ensayo publicado por el diario italiano «La Repubblica», el Papa Francisco destacó que al renunciar al pontificado en febrero de 2013, Benedicto XVI dio una ¨gran lección¨ de humildad y piedad a todos los católicos. ¨Nos está dando, quizá de la forma más clara, una de sus grandes enseñanzas de la teología de rodillas¨, sostuvo.
En un breve ensayo publicado por el diario italiano «La Repubblica», el Papa Francisco destacó que al renunciar al pontificado en febrero de 2013, Benedicto XVI dio una «gran lección» de humildad y piedad a todos los católicos.
El pontífice argentino aseguró que, desde su retiro, el Papa emérito «nos está dando quizá de la forma más clara una de sus grandes lecciones de la ‘teología de rodillas'».
Francisco escribió la introducción al libro “Enseñar y aprender el amor de Dios”, primer volumen de la serie: Joseph Ratzinger/Benedicto XIV, Textos selectos, que consta de 7 volúmenes que se publicarán anualmente, de 2016 a 2022, en España por la editorial BAC. El primer volumen se presentará el martes 28 en una ceremonia en el Vaticano en la víspera del 65 aniversario de la ordenación sacerdotal de Joseph Ratzinger.
A la presentación se espera que asisten tanto el Papa Francisco como su antecesor, en lo que se constituirá en una de las pocas apariciones públicas de Benedicto XVI desde que renunció al pontificado.
El pontífice asegura en el prefacio que Benedicto XVI “encarna ejemplarmente el corazón de toda la acción sacerdotal”: ese profundo enraizamiento en Dios sin el cual toda la capacidad organizativa posible y toda la presunta superioridad intelectual, todo el dinero y el poder resultan inútiles. Él encarna –asegura Francisco– esa constante relación con el Señor Jesús sin la cual nada es ya verdadero, todo se convierte en rutina, los sacerdotes en asalariados, los obispos en burócratas y la Iglesia deja de ser la Iglesia de Cristo y se convierte en un producto nuestro, una ONG a fin de cuentas superflua.
Yo me permito decir –indica el Papa– que si alguno tuviera en algún momento dudas sobre el centro del propio ministerio, sobre su sentido, sobre su utilidad, si en algún momento le vinieran dudas sobre lo que los hombres esperan verdaderamente de nosotros, medite profundamente las páginas que se nos ofrecen en este libro, porque los hombres esperan de nosotros sobre todo lo que en este libro se encuentra escrito y testimoniado.
Por otro lado, asegura que leyendo este volumen se ve claramente como el papa emérito, en los sesenta y cinco años de sacerdocio que se celebran el 29 de junio próximo, “ha vivido y vive, ha testimoniado y testimonia ejemplarmente esta esencia del actuar sacerdotal”.
Por otro lado, Francisco subraya que la oración, “nos dice en este libro y nos testimonia Benedicto XVI”, es el factor decisivo: es una intercesión de la que tienen más necesidad que nunca tanto la Iglesia como el mundo. Este volumen, explica Francisco en el prólogo, está dirigido en la misma medida a los sacerdotes y a los fieles laicos.
Francisco sostuvo que Benedicto XVI está mostrando que lo que es más importante para los «diáconos, sacerdotes y obispos» no es «gestionar los asuntos de cada día, sino rezar por otros, sin parar, en cuerpo y alma, exactamente lo que el Papa Emérito está haciendo hoy».
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