Efectivos brasileños y agentes de inteligencia argentinos trabajaron en conjunto para el arresto en Foz de Iguazú.
Ibar Pérez Corradi -el prófugo más buscado de la Argentina- iba de casa en casa y sabía que estaba siendo perseguido por fuerzas de seguridad y personal de inteligencia de, al menos, tres países. Policías y espías argentinos, paraguayos y brasileños le seguían sus pasos y se sabía cercado. También temía que lo estuvieran buscando supuestos «sicarios» para matarlo. La suerte del supuesto «cerebro» del triple crimen de General Rodríguez cambió cuando la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) argentina coordinó y activó de manera legal junto a la Policía Militar de Brasil la búsqueda.
A fines del año pasado y hace unos meses estuvo a punto de caer, pero sorteó de manera aún inexplicable el arresto. Sospechan (con muchos datos) que hubo complicidades en el lado paraguayo que hicieron fracasar los operativos. Ahora, estaba hablando con sus abogados, Carlos Broitman y Juan José Ribelli, para una entrega «negociada» con autoridades de Paraguay. Antes del arresto, que ocurrió esta madrugada, había sido noticia hace dos semanas por una maniobra de falsificación de documentos que le generó una nueva causa judicial en ese país.
«Grupos del sicariato fueron a matarlo a Ciudad del Este. Son ex agentes de inteligencia presuntamente de la Argentina, mano de obra desocupada, que fueron a la Triple Frontera con fines de asesinarlo», afirmó esta mañana Broitman, quien reveló los detalles del operativo que dio con Pérez Corradi, que incluyó decenas de móviles, unos 50 agentes y hasta el uso de drones. Su hijo de cuatro meses estaba enfermo y, dicen sus defensores, decidió poner fin a su raid para no exponer la vida del pequeño de cuatro meses. Lo detuvieron en la casa que tenía en Foz de Iguazú, en Brasil, estaba con su pareja y los hijos que tenía con ella. Los investigadores del lado argentino admite que su mujer fue clave para el arresto: descuidos y una eficaz infiltración del círculo íntimo por esa vía hicieron caer al prófugo más buscado.
Tras el arresto, según el abogado Broitman, esta mañana ella habló con los abogados y les contó cómo fueron los últimos minutos en libertad de Pérez Corradi: «Él estaba en la casa en Foz de Iguazú, con los dos chicos. Cuando entraron los que fueron a buscarlo la nena se asustó y se metió abajo de la cama. No estaba con documentación, pero rápidamente pudieron identificarlo y decidieron expulsarlo al Paraguay, con destino a Asunción».
El abogado ratificó que estaba «organizando la entrega» a las autoridades de Paraguay, que lo acusaban por la falsificación del documento. «Hizo posta en la ciudad de Foz de Iguazú y tenía que llegar a Paraguay. Tenía que cruzar, cambió dos o tres lugares, pero no llegó, no pudo cruzar. Lo detuvieron».
