El primer trimestre escolar cerró con resultados altamente satisfactorios en el Hogar de Día, donde el 99% de los participantes está escolarizado. Pero el motivo de orgullo no solamente es que los niños y adolescentes están asistiendo a clases, sino que además obtuvieron muy buenas notas, la mayoría aprueba satisfactoriamente las materias y están presentando sus boletines de calificaciones, donde sus maestros destacan el esfuerzo y los alientan a seguir adelante.
Actualmente el promedio de participantes que asiste al Hogar de Día, que depende de la Subsecretaría de Atención Integral Comunitaria, de la Niñez, Adolescencia y Familia, es de 91 niños, niñas y adolescentes y el mayor porcentaje se concentra en las edades de 10 a 13 años. El 1 por ciento que no está escolarizado corresponde generalmente a nuevos niños que son admitidos y cuya inscripción en las escuelas se trabaja desde el momento que los chicos llegan a la institución.
Desde el Hogar de Día de Posadas actualmente se articula con más de 26 escuelas de distintos barrios, comunes, especiales, entre ellas once establecimientos primarios: como la Nº 76, 238, 527, 528, 718, 721, 809, 815, 817, 842, 893. Las escuelas especiales Nº 1, Nº4; la Escuela de Adultos Nº 8; el Instituto Taller para No Videntes, las secundarias BOP Nº8, BOP Nº 1, Comercio 6, Comercio 18; además de varios NENIS, entre los que están el 2016, 2017 y Nº1.
Los tutores, docentes y psicopedagogos los acompañan en la realización de sus tareas, así como para repasar el contenido de acuerdo con los programas de sus respectivas escuelas.
Silvina Márquez, es jefa del Departamento de Educación del Hogar, orgullosa muestra los boletines a medida que los niños traen para registrar el rendimiento escolar. “Todos excelentes, para nosotros es un orgullo que concurran a la escuela y que traigan estas notas, todos aprobados, por ahí a alguno le falta un puntito, pero se trabaja mucho y es una verdadera satisfacción”, comentó mientras enseñaba las notas de los niños, de quinto, sexto, séptimo, segundo, primero de todos los grados y de diversas escuelas.
En las clases de apoyo escolar antes de los boletines se anticipan las notas, las evaluaciones demuestran el avance y los logros.
“Se nota el cambio de actitud de los chicos, siempre se los motiva y se los acompaña para que sientan un respaldo y que pueden contar con sus maestros y tutores para realizar las tareas, porque hay a quienes también les cuesta”, agregó Márquez.
Recortes, trabajos prácticos, ejercicios combinados, en uno de los salones, donde los estudiantes de secundaria hacen apoyo escolar. En el otro salón, las prácticas pasan por las vocales, completar renglones con letras cursivas, cuentos, sumas y restas, pronunciación, donde los más chicos, de los primeros grados, repasan y completan sus cuadernos.
Después del desayuno que se sirve a las 8.30 cada grupo se dirige a su aula. La prioridad es la escuela y el apoyo escolar, posteriormente se dictan otros talleres, como plástica, manualidades, cocina, cuidado del medio ambiente, y antes del almuerzo realizan deportes y recreación. Para los participantes que concurren por la mañana a la escuela, al salir almuerzan en el Hogar y por las tarde se concentran las actividades y talleres.
La población de niños, niñas y adolescentes que concurren al Hogar de Día se encuentra en situación de vulnerabilidad social y desde la inscripción se trabaja también con las familias, las madres y tutores, porque para la asistencia, la higiene, presentación, también depende de ellos y se busca el compromiso para que el chico asista a la escuela.
El seguimiento desde el área de Educación también se realiza de manera constante, el trabajo con los establecimientos escolares es articulado y se está en permanente comunicación con docentes y directivos, porque el objetivo fundamental es evitar la deserción.
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