La construcción de las torres de Villa Angela, dos edificios de siete pisos emplazados sobre la Costanera y que tienen también entrada por el Parque Paraguayo, avanza a paso firme y estará terminada para el primer trimestre del 2018 afirmaron hoy sus responsables en una presentación a la prensa.
Este lujoso complejo (con entrada por Troazzi al 700) es construido por la empresa Ratti, por orden del desarrollador inmobiliario que impulsa el proyecto, la firma Compañía Inversora Libertador, que realiza con este, su primer trabajo en la provincia.
«Estamos finalizando las bases, los cimientos, en breve comenzamos a llenar las losas y luego empezamos a construir hacia arriba, estimamos terminar en el primer trimestre del 2018», explicó a Misiones Online, Luis Fleitas, gerente de Ratti Construcciones.
«Tenemos casi todo vendido, nos quedan nada más que 20 unidades», señaló José Luis Sperdutti, de la empresa que comercializa los departamentos. «Hay unidades de distintos valores, arrancan desde los 1.800 dólares el metro cuadrado», comentó.
La presentación se realizó en el predio de 4.300 metros cuadrados que ocupará el complejo, con los obreros trabajando a pleno. «Ahora hay 35 y en otra etapa llegarán a ser 80, esto nunca se detuvo ni aminoró su ritmo, más allá de los vaivenes de la economía», explicó Fleitas, de la empresa constructora. Cuando se termine, el costo total del complejo será de 200 millones de pesos, aproximadamente.
Desde el terreno donde se empezarán a erigir los 7 pisos de Villa Angela se tiene una vista panorámica del río Paraná, el monumento a Andrés Guacurarí y el puente internacional San Roque González de Santa Cruz. El complejo tendrá una salida peatonal a la Costanera.
Torres de lujo con «amenities»
El concepto de Villa Angela es bastante novedoso para el mercado inmobiliario local, si bien ya hay otros desarrollos con algunas de las características de estos edificios. Se trata de un concepto muy común en Buenos Aires y otros centros urbanos como Rosario o Córdoba.
Consiste en edificios que tienen todo tipo de comodidades, llamadas «amenities» en la jerga inmobiliaria, por las cuales también se pagan, mes a mes, expensas más elevadas que lo que se suele pagar por otras unidades del mismo tamaño en otros edificios. En general son departamentos relativamente chicos, no pensados para familias numerosas, sino para profesionales jóvenes o parejas mayores, que ya no viven con sus hijos. El segmento al que se apunta es el llamado ABC1, de ingresos medio altos o altos.
«Nuestro público es gente muy viajada, que conoce este concepto, y vienen de Posadas, el interior y también tenemos inversores de otras provincias», explicó a Misiones Online, Maximiliano Guida, la cara visible de la Compañía Inversora Libertador SA, desarrolladora del proyecto.