El ministro de Energía de la Nación, José Aranguren, ya anticipó a las plantas de GLP de todo el país que en los próximos días quedará sin efecto el subsidio que recibían y que serían autorizadas a incrementar sus precios para compensar la ausencia de dicho beneficio, ello implicaría un incremento de entre 25 y 30 pesos en las garrafas de 10 kilos.
Consultados al respecto, desde las principales distribuidoras de la provincia, admitieron que los precios subirán en pocos días. Desde Candelaria Gas afirmaron que los nuevos valores entrarían en vigencia el lunes, mientras que desde Shell Gas, señalaron que todavía no tenían órdenes de modificar su tarifario, aunque anticiparon que en no más de diez días habría subas.
Actualmente los precios de las garrafas están regulados por el Estado a través del Programa Hogar, que destina subsidios tanto para las plantas de gas, cuanto para los consumidores de menores recursos. Desde las distribuidoras consultadas, explicaron que la Nación eliminaría el subsidio a las empresas, pero mantendría el que se entrega de manera directa a los usuarios.
Conforme lo establecido en dicho programa, las distribuidoras no pueden vender las cargas de 10 kilos por encima de los 97 pesos, tope que se elevará por la quita del subsidio a las empresas.
Desde las distribuidoras locales estimaron que las garrafas de 10 kilos, que actualmente se venden a 70 pesos, retiradas de planta, pasarán a valer alrededor de 100 pesos, mientras que el precio del mismo combustible entregado en domicilio, pasará de 110 a 150 pesos aproximadamente. Mientras que los cilindros de 45 kilos valdrán unos 700 pesos con servicio de entrega incluido (no se venden en planta).
JRC EP
