La universitaria oriunda de Eldorado, abusada sexualmente en enero en un albergue estudiantil de la calle San Luis, contó al canal 13 de Buenos Aires el horror que le tocó vivir. Su testimonio cobra mucha relevancia en estos días porque hace una semana sucedió en un departamento del centro otro caso similar, que tuvo como víctima a otra chica de la Capital del Trabajo.
“Vi a alguien encapuchado, porque no llegué a verle la cara” relató sobre el hombre que ingresó a su departamento por el balcón.
“Cuando me di cuenta lo que estaba pasando quise gritar, pero me agarró el cuello y me tapó la boca y no me dejaba respirar. Me dijo que no gritara que me quedara tranquila porque tenía un cuchillo y me lo hizo sentir. Yo sentí gotas de sangre y me di cuenta que me había golpeado fuerte”, detalló y continuó: “Miro al costado y vi un ladrillo grande. Me quedé ahí y vi que se sacó el pantalón, se sacó la ropa y me violó”, contó en el noticiero de Canal 13.
Dijo además que el violador la amenazó: “Me dijo que no dijera nada porque él me puede buscar en la facultad”.
La joven detalló también como se retiró el pervertido: “Después se visitó y me dijo que me quedara quietita 20 minutos que espere y que después haga lo que quiera”.
La universitaria se refirió a la joven que también fue violada en Posadas, el jueves pasado, estaba sola “es evidente que nos estudió y esperó el momento que estábamos solas”, manifestó.
Sin pistas
A una semana de la violación sufrida por la otra chica de Eldorado que estudiaba en Posadas, todavía no hay pistas firmes pero se aguarda algo que sería primordial en el caso y es el resultado de los estudios practicados a la víctima y con ellos formar un patrón genético para comprara con los casos ocurridos en enero, también con una joven eldoradense y otro en el 2013.
Las similitudes en los casos y el hecho de que siempre las víctimas fueron chicas estudiantes que vivían en pleno centro, hacen pensar a los investigadores que hay un violador con al menos tres casos sobre sus espaldas.
Por esa razón hay que esperar que los estudios realizados a la joven que fuera víctima el jueves pasado en su departamento de Tucumán Roque Sáenz Peña sean remitidos a Buenos Aires y así confeccionar un patrón genético que pueda ser comparado con el otro caso de este año, el de la joven que fue atacada en un albergue de calle San Luis en el mes de enero. Y también con el de otro hecho sucedido en 2013 cuando otra estudiante fue abordada en su departamento del centro posadeño.
