La consultora privada Noanomics analizó el incremento que tuvo el empleo del sector público en las provincias durante los últimos 12 años. Según este trabajo, la cantidad de trabajadores estatales aumentó 53 por ciento en promedio en las 24 jurisdicciones, mientras que en Misiones varió en un 29 por ciento. El récord de crecimiento de la planta pública lo tiene Tierra del fuego, con 108 por ciento.
El incremento del empleo público aparece como una de las principales razones del sustancial aumento del gasto público que se registró en los doce años de gobierno kirchnerista. Aunque todas las provincias agrandaron su planta de empleados durante el período referido, se notan diferencias muy grandes entre las distintas jurisdicciones.
Según un informe publicado por la consultora privada Noanomics y firmado por Félix Piacentini, la cantidad de agentes públicos en las provincias aumentó 53 por ciento, pasando de 1,4 millones a 2,12 millones, desde 2003 a 2015. “Esta enorme expansión de empleo público tuvo su correlato monetario al incrementarse el peso del gasto salarial en los presupuestos provinciales. Así, el gasto en personal consolidado de las 24 jurisdicciones más que se duplicó como porcentaje del PBI entre 2004 a 2015, pasando del 4,3 al 9,3 por ciento estimado para el año pasado”, destaca el trabajo.
Sin embargo, el comportamiento del empleo público en las diferentes provincias fue muy dispar: mientras algunas jurisdicciones como Tierra del Fuego y Chaco duplican ese promedio, otras como Misiones o San Luis apenas llegan a la mitad. Lo mismo ocurre si se analiza solamente lo ocurrido el año pasado, el promedio general de expansión fue de 3,2 por ciento, pero distritos como Cuidad de Buenos Aires y Salta triplicaron ese guarismo, mientras que lo observado en Misiones y La Pampa no llega siquiera a un tercio de esa cifra.
“Para todo 2015 estimamos que en las 24 jurisdicciones se habría llegado a un total de 2.122.000 empleados públicos provinciales, lo que implica un aumento en valores absolutos de 66 mil puestos y una variación del 3,2 por ciento en relación al 2014. De esta forma se abandona la relativa prudencia en la incorporación de personal que se observó en el bienio 2013-2014 con tasas promedio del 2 por ciento (las más bajas desde 2003 junto con el 2006), para retornar a los incrementos anuales promedio que se podían contemplar entre 2009 a 2012 (3,5 por ciento promedio anual). Indudablemente la causa debe buscarse en la campaña electoral, y en este sentido el 3,2 por ciento de 2015 es muy parecido al 3,7 por ciento que se verificó en la anterior elección presidencial de 2011”, señaló el autor del informe.
JRC EP
