Cuentas provinciales vuelven al rojo por mayores gastos en obra pública y personal, pero el NEA es la excepción

Después de dos años de mantener sus cuentas equilibradas en virtud de mayores ingresos, las cuentas de las provincias volvieron en su conjunto a los números rojos y al déficit, impulsadas por mayores gastos en obras públicas y contratación de personal el año pasado.

En total las provincias obtuvieron ingresos por $874.000 millones en 2015 entre transferencias por coparticipación, fondo de la soja, pagos discrecionales de la Nación -como Adelantos del Tesoro- y también recaudación de impuestos provinciales, con Ingresos Brutos a la cabeza. En el rubro erogaciones, las provincias registraron $916.000 millones, con un déficit financiero de $41.000 millones luego del pago de intereses de la deuda.

En rigor, dejando de lado el pago del servicio de la deuda y tomando solo los gastos corrientes, en 2015 las provincias volvieron a tener un déficit primario luego de dos años con cuentas equilibradas (2013) o superavitarias (2014).

Las razones hay que buscarlas en los mayores gastos propios de un año electoral, donde se le dio mucho impulso a la obra pública y también a las contrataciones de personal en distintas dependencias de los estados provinciales. A esto, se suma una recaudación de impuestos que en cada provincia se desaceleró como consecuencia de la menor actividad económica que hubo en 2015.

El NEA fue de lo mejor

Sin embargo, la región que mejor anduvo en cuanto a su performance fiscal fue el NEA, integrado por Chaco, Corrientes, Formosa y Misiones, que registró superávit primario y superávit financiero (tras pagar deuda). El NEA tuvo números azules y fue la única región, junto a Cuyo, que no tuvo cifras en rojo ni en su resultado primario (2174 millones) ni en su resultado financiero (1921 millones), indica un informe de la consultora Economía & Regiones.

«La pérdida de dinamismo de la recaudación local fue la principal causante de la desaceleración de los recursos provinciales, ante el escenario de estancamiento económico y la falta de reformas tributarias de relevancia», reza el informe de la consultora fundada por Rogelio Frigerio, el actual ministro del Interior de Macri.

Según E&R, la provincia de Misiones tuvo un incremento de 37,1 por ciento en los ingresos por coparticipación, que ascendieron a un total de 14.283 millones de pesos. Además, recibió otros 500 millones de pesos en concepto de transferencias por el Fondo Solidario de la Soja.

La provincia de Misiones también figura entre las que mejor performance recaudatoria tuvo con su fisco provincial. Después de La Rioja, la Dirección General de Rentas de Misiones fue el segundo fisco provincial que más incrementó su recaudación con un aumento de 47% respecto al año anterior. Claro que esto también implicó una presión impositiva de las más altas del país, que en tiempos de una economía con menor actividad pueden ayudar a consolidar un cuadro recesivo.

Nación rica, provincias pobres

El informe de Economía & Regiones, consultora especializada en la relación fiscal entre la Nación y las provincias, vuelve a poner sobre el tapete la enorme desigualdad que hay entre el Gobierno central y el interior del país en cuanto al reparto de los recursos.

«Desde la óptica del Federalismo Fiscal, la distribución mantuvo su sesgo centralizador, dado que el Gobierno Nacional concentró cerca de tres cuartas partes de la renta federal, quedando en las arcas provinciales sólo un 28% del total. De esta manera, se cristaliza la situación de desequilibrio fiscal vertical, en la cual las provincias reciben recursos insuficientes en relación a sus funciones de gobierno (o responsabilidades de gasto), que abarcan lo relacionado a educación, salud, seguridad y justicia, entre otras, tarea que implica asumir cerca del 50% de lo que gasta el sector público argentino anualmente, esto es, consolidando los tres niveles de gobierno», dice el informe de E&R.

Cabe recordar que la ley de Coparticipación fiscal vigente -que debió haberse reformado por mandato Constitucional en la última reforma de 1994- determina que como mínimo un 34 por ciento de los recursos que recauda la Nación deben ir a las provincias, algo que no se ha cumplido en los últimos tiempos y tampoco se ha cumplido el año pasado con tan solo el 28 por ciento enviado a los distritos, según lo afirma E&R.

El presidente Mauricio Macri anunció, apenas asumió, que buscaría reformar -por fin- la ley de Coparticipación que data de 1988, pero en los últimos tiempos, habida cuenta de las trabas políticas, el Gobierno Nacional parece haber bajado sus pretensiones respecto a la intención inicial. El que conduce estas negociaciones es Rogelio Frigerio, el ex titular de Economía & Regiones, la consultora autora de este informe que enfatiza la inequidad fiscal en el reparto de los recursos Nación-Provincias.

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