Sorpresivamente esta mañana el club Crucero del Norte comunicó que Sebastián Rambert presentó su renuncia al cargo de director técnico.
«El club Crucero del Norte comunica que en la mañana de hoy, el señor Sebastian Pascual Rambert presentó su renuncia como entrenador del plantel principal del equipo de fútbol», dice el escueto comunicado publicado por Crucero en su página web.
«Los motivos que esgrimió Rambert responde a cuestiones personales. Después de dirigir al equipo por última vez esta mañana, comunicó su decisión a los futbolistas. El club agradece el tiempo de trabajpo ejecutado en el club por parte de Rambert y su equipo de colaboradores. Hasta que la comisión directiva se reúna de manera extraorindaria para elegir el reemplazante, el plantel seguirá trabajando en Santa Inés a las órdenes del PF Daniel Jara», continúa el comunicado.
El torneo arranca en 12 días
Sebastián Rambert tenía todo listo para arrancar la temporada el 30 de junio ante Los Andes, había planificado toda la pretemporada y había intervenido directamente en las conversaciones para la incorporación de jugadores, ya que el plantel del Colectivero se renovó en casi su totalidad. Julio Koropeski, el titular del club, había manifestado su satisfacción por el trabajo de Rambert, más allá de que los resultados no lo acompañaron, y a pesar de algunas críticas, se mantuvo firme en la postura de ratificarlo mucho antes de concretarse el descenso a la B Nacional el año pasado.
Por eso llama mucho la atención el momento de esta renuncia. Crucero del Norte jugó un amistoso el sábado a la noche ante Sarmiento de Resistencia, equipo del Federal A, donde empató 0 a 0 con los posibles titulares y cayó 1 a 0 con los suplentes. Antes, había perdido 2 a 0 ante Cerro Porteño el lunes de la semana pasada y también le había ganado a El Brete, equipo campeón de la Liga Posadeña, por 1 a 0.
Si bien es cierto que el equipo no lució, también es cierto que se trató de amistosos de pretemporada donde los jugadores se encuentran en plenas tareas físicas y el rendimiento futbolístico suele ser muy relativo a la hora de evaluar a un plantel y a su DT.
¿Viene Dechat?
Crucero del Norte dejó en claro que saldrá a buscar un entrenador para encarar el torneo de la B Nacional y si bien por Santa Inés no dan pistas, lo cierto es que la dirigencia ya habría conversado con un histórico del club: Pedro Dechat.
Dechat es el «Carlos Bianchi» de Crucero del Norte, estuvo cinco años y logró dos ascensos, del Federal B al Federal A, y de esta categoría a la B Nacional. Es tan valorado por la tierra colorada que hace poco un grupo de socios de Guaraní A. Franco se reunió con Roberto Enríquez para pedirle que trajera al técnico en reemplazo de la dupla integrada por Humberto y Martin Zuccarelli, que finalmente se quedó en Villa Sarita.
Dechat, además, viene de ganar el ascenso del Federal A a la B Nacional con Juventud Unida de San Luis, club del cual se desvinculó a mediados de diciembre pasado.
Un comienzo alentador que luego se fue diluyendo
Rambert asumió el mando de Crucero del Norte en la fecha 11va del torneo de 30 equipos el año pasado, tras la salida de Gabriel Schurrer. Inmediatamente fue goleado 5 a 2 ante Unión en Santa Fe, el sorprendente equipo de Leonardo Madelón. El equipo sin embargo mostró otra actitud ofensiva y logró ganar dos de sus tres partidos en Primera en esas primeras semanas de Pascualito al frente del Colectivero. Hubo victorias ante Defensa y Justicia y ante San Martin de San Juan, para irse al receso de la Copa América en un virtual desempate por el segundo descenso con Huracán. Toda una posición de «privilegio» para un equipo novato y del fondo de la tabla como Crucero.
Pero tras el receso vino la debacle, el equipo, que había mostrado mejorías, nunca pudo volver a exhibir esa actitud ofensiva de los primeros partidos de Rambert. El golpe mortal vino en el partido en casa ante el rival directo, Huracán. Crucero ganaba 3 a 0 y se floreaba pero increíblemente, en los últimos 15 minutos ,el Globo se lo terminó empatando. Fue, irónicamente, el único punto que sacó en la segunda rueda ya que antes y después perdió todo lo que jugó. En total, Rambert disputó 19 partidos, ganó 2, empató 1 y perdió 16. Números que por sí solo alcanzan para eyectar a cualquier DT de un banco de suplentes, por grandes que sean sus pergaminos. No es el caso de Rambert, quien como DT solo registra un paso por Aldosivi cuando estaba en la B Nacional, también con resultados pobres desde lo deportivo.
El problema de Rambert es que, lejos del pragmatismo, basó su filosofía de juego en pensar primero en atacar y luego en defender. Para lograr eso, el DT les pide a los jugadores un nivel de esfuerzo físico y concentración muy altos, para poder volver a la fase defensiva cada vez que el equipo pierde la pelota en ataque. Pero la realidad es que esa idea, plasmada con planteles modestos que compiten con jugadores de otra jerarquía, como el caso de Crucero, no ha dado resultados positivos. Además, cuando el equipo empieza a perder, los jugadores empiezan a perder la confianza en la idea, en el DT y en sus propias posibilidades de éxito y eso se traslada al rendimiento en el rectángulo de juego.
Por eso llama la atención que el club haya prescindido de Rambert. O más bien, que lo haya mantenido en el cargo para dejarlo ir a 12 días del comienzo del nuevo torneo. Salvo que la dirigencia de Crucero necesitara al DT para encarar una profunda reestructuración del plantel y no deseaba traer un técnico nuevo para encarar esa incómoda tarea.
MB
EP
