Tres días después de ser baleados por los tres condenados por el triple crimen de General Rodríguez que se fugaron de la prisión de General Alvear, los policías Fernando Pengsawath y Lucrecia Yudati siguen internados; el primero, en grave estado.
«La joven evoluciona bien y el hombre sigue en terapia intensiva, se encuentra en estado crítico y su cuadro es más grave», dijo esta mañana Marcelo Schieber, subdirector clínica Fitz Roy, al dar a conocer el último parte médico de los oficiales.
El médico señaló que el joven de 22 años presenta «heridas de arma de fuego en abdomen», con «pronóstico reservado», «sedación farmacológica» y «asistencia mecánica respiratoria».
Por su parte, la otra agente baleada el jueves en la ciudad de Ranchos, Lucrecia Yudati, de 33 años, se encuentra «consciente» y «anímicamente bien, evolucionando», aunque tiene un pie comprometido.
«Hay que ser muy paciente, la evolución es lenta en los dos casos», agregó Yudati.
LA NACION