El insólito hecho tuvo lugar en la ciudad rionegrina de Cipoletti. Un hombre dejó su vehículo en la puerta de un estacionamiento. Tras un tiempo largo en el que no pudieron ubicar al conductor, se juntaron varios vecinos y decidieron dejarle ese regalito.
El conductor de un Honda City dejó su auto en la puerta de un estacionamiento, desatando la ira de los vecinos que, al no poder ubicarlo, decidieron envolver todo el vehículo en papel filme.
Media hora más tarde, llegó el titular del rodado y se encontró con dos sorpresas: el auto preparado para regalo y un agente que ya le había confeccionado un acta.
Hace dos semanas, una mujer rayó con aerosol un auto en el centro de Neuquén, luego de que también obstaculizara la salida de su vehículo, y escribió la leyenda “No estacionar mal por favor”, cubriendo toda la chapa.
