Los vecinos de Ostende están indignados y conmovidos por el homicidio de Benjamín Ayala y recuerdan los maltratos que sufría.
«Estaba tan en pedo ayer que no sé si lo regalé o no», le contestó Clauda Ayala de 22 años a un vecino que le preguntó por su hijo Benjamín.
Los testimonios de los vecinos de Ostende donde vivía el nene de un año y medio junto a su mamá, su hermano mayor (de tres años) y su abuela, son similares: dicen haber visto cómo la joven madre maltrataba al nene y lo insultaba.
Ayala sería alcohólica, varios testimonios refieren haberla visto alcoholizada. En ese estado habría encerrado más de una vez a sus hijos para que no la molesten.
Al parecer, ella misma contaba que a veces lo descuidaba por consumir bebidas alcohólicas en exceso y hasta lo encerraba.
Ayala está imputada y podría enfrentar una condena a prisión perpetua si se prueba que ella mató a su hijo, quien fue encontrado muerto en un descampado. Recordamos que ayer se negó a prestar declaración indagatoria y a que se le extrajera ADN.
