Un bebé intenta bajar de una cama pero intuye que es demasiado alta para él. Sin embargo, no se queda en la cama, ni llora para que un adulto vaya a rescatarlo, piensa inteligentemente la mejor manera de bajar.
Seguro que la estrategia de este pequeño te sorprende y como mínimo te sacará una sonrisa. Mirá las imágenes.