El problema de las tierras de Garupá

Por Armando Barrionuevo
Uno de los problemas mas graves de Garupá, de vieja data, y que el municipio no ha siquiera esbozado una solución integral; es el de los terrenos privados  -y aún los públicos-  existentes en el municipio.- Estos terrenos representan las posibilidades de asentamiento social, o la consolidación de los ya ocupados por los habitantes de menores recursos que hacen a la misma finalidad.

En apretada síntesis, digamos que el derecho de propiedad  -sobre todo inmueble-  nación con carácter absoluto en la historia; viniendo a morigerarse en el tiempo histórico con la incorporación de la función social de la propiedad y ahora con los derechos humanos. Dentro de este problema se incluyen el derecho social a la vivienda; el derecho a la regularización de los asientos informales consolidados o no; y el combate a la especulación inmobiliaria.-Nuestra Constitucion Nacional ha consagrado en el art.17 el derecho inviolable a la propiedad privada (principio conservador) el que se contrapone a la expropiación como función de mayor rango en cuanto a la valoración del interés general.- A su vez, el art.41 de la CN consagra el principio del desarrollo sustentable, lo que lleva ínsito el uso racional del suelo.-

La regulación del derecho de propiedad originariamente perteneciente a las provincias, ha sido delegada a la Nación, para lo cual ésta ha dictado el código civil, ahora reformado.- Pero hay que tener presente que lo no regulado por la nación es de resorte de cada provincia, por aquello que lo que no se da se conserva.-

Que ocurre en Garupa? Que debe tener el mayor porcentaje de la provincia en materia de asentamientos irregulares en propiedad privada. Algunos de muchos años, y muchos otros bastante mas recientes. El origen de estas ocupaciones, que se caratulan de ilegales, y hasta ahora lo son; estriba en una mala administración comunal que al parecer otorga “permisos de ocupación” de tierras privadas; sabiendo o debiendo saber que ni el Intendente ni El Concejo Deliberante tiene atribuciones de autorizar ocupaciones; dado que nadie puede ceder a otro un derecho que no tiene, ni irrogarse facultades judiciales lo cual es delito.- El esquema así deviene perverso porque el ocupante, de escasa cultura y recursos, ocupa el terreno,  y cree que porque la comuna lo autorizó, está en situación “legal” Hay miles de personas engañadas y con ello, sus familias y un sector social distorsionante de la realidad. Pero como no existe el derecho sin ley que lo respalde –salvo el de las bestias de Sarmiento- no hay hasta ahora ni plan ni solución oficiales.- La realidad se completa con las acciones judiciales de los titulares de dominio que buscan recuperar sus tierras; y la espantosa especulación de algunas inmobiliarias que ante bastas extensiones mandadas a ocupar, de golpe aparecen los loteos con pingües ganancias. Total al ocupante se lo manda a otro lote y listo.-

Ocuparse del terruño de la gente hace a los derechos humanos. Ya no se trata que la propiedad privada sea absoluta sino compartida con aquellos que la necesitan para vivir, trabajar o producir.- Por eso hay que tener presente con la legislación actual y los tratados internacionales que: para las tierras en Garupá, usar el mercado inmobiliario como sea posible, pero utilizar al Estado tanto como sea necesario.-

Miguel Onetto, como candidato a Intendente de Garupá tiene una propuesta de solución integral a esta problemática, la que en colaboración de técnicos y juristas, serán explicitadas por este diario en una segunda entrega.-

                                         

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