El Tribunal Penal 1 de Eldorado, compuesto por los jueces Atilio León, Lidia Gallardo y Eduardo Jourdan, dictó ayer al mediodía la esperada sentencia 1960/2015. Era la vinculada con la muerte de Jordi Díaz (19), el joven al que golpearon en una fiesta y luego apareció en un zanjón en Puerto Iguazú. Cuatro de los cinco imputados fueron absueltos y al restante se lo declaró penalmente responsable, porque era menor al momento del hecho, y se lo consideró el responsable del trágico episodio.
Los absueltos del delito de “homicidio en riña” fueron Eduardo De Sa, los hermanos Lucas y Julio César Colman y Esteban Rojas.
En tanto que a Juan “Kike” Da Silva, se le declaró la responsabilidad penal y se lo condenó a abonar en diez días a la familia Díaz, 160 mil pesos por daño moral.
Los jueces no hicieron lugar a la pretensión de lucro cesante y daño material como gastos de sepelio. E impusieron las costas al demandado Da Silva.
Se fijó el 1° de octubre como el día en que se dará lectura a los fundamentos de la sentencia, que estarán a disposición de las partes a partir de las 12.
El fiscal Federico Rodríguez había solicitado 3 años de prisión en suspenso para Eduardo De Sa, los hermanos Lucas y Julio César Kohlman y Esteban Rojas. Y para Juan “Kike” Da Silva solicitó que se le atribuya la responsabilidad, por su condición de menor.
Y el actor civil, Gustavo Staude, había pedido un monto de casi 2 millones de pesos (un millón de pesos por lucro cesante, 800 mil pesos por daño moral y unos 20 mil pesos por gastos fúnebres).
La jornada del último día de juicio se inició a las 9.30 con las palabras del imputado Eduardo de Sá, el único que pidió la palabra antes de la sentencia. Dijo: “Hago uso de la palabra porque siempre que pude hablar lo hice, no como dijo el fiscal, yo jamás guardé silencio y jamás me resistí a un allanamiento, eso es totalmente falso, como muchas cosas falsas que aquí quedaron desenmascaradas. Y no guardo rencor por la única testigo usada por la policía para declarar en mi contra, yo siendo mujer y menor seguro también tendría miedo. Aun así habiendo pasado más de 6 meses en prisión por ir a una fiesta en la que yo fui víctima porque dos barras me pegaron al lado de mi auto en la calle, jamás pude haber estado en dos lugares al mismo tiempo. Confío en la Justicia y creo que la justicia justamente está para eso, para separar culpables de inocentes”.
Luego de estas palabras, y cerca de las 10 de la mañana, el tribunal pasó a deliberar. La lectura del fallo se dio alrededor de las 12.30.
Cabe destacar que mientras se desarrollaba la última jornada de este juicio por la muerte de Jordi Díaz, (ocurrida el 19 de mayo de 2012, en el marco de una pelea que se generó en una fiesta de cumpleaños del barrio Villa Alta de Iguazú), tanto familiares y amigos de la víctima cortaron la calle frente al Tribunal con pancartas y bombos, donde pedían justicia por la muerte de Jordi.
Tras la lectura del veredicto, el fiscal Federico Rodríguez se mostró sorprendido y dijo que no estaba de acuerdo con el fallo y que tras la lectura de los fundamentos prevé apelar junto a la familia y al actor civil.
Por su parte, Rubén Díaz, padre de Jordi, manifestó su decepción y sostuvo que “no puedo creer esto, mataron a mi hijo y nadie piensa pagar por eso, creo que es una gran injusticia, pero la esperanza es lo último que se pierde y nosotros seguiremos luchando hasta las últimas consecuencias”.
Caso Jordi Díaz: el fallo solo encontró un culpable
