El titular del área de Transporte de Provincia, Hermes Almirón, cuestionó en duros términos a los aduaneros, quienes anunciaron un paro en coincidencia con la visita del Papa Francisco a Paraguay y además exigen que la prestataria del servicio de trenes pague para que los empleados de Aduanas trabajen durante los fines de semana y feriados. “Ellos deciden quien cruza la frontera, a qué hora y a qué costo”, señaló el funcionario, quien además acusó al organismo nacional de montar estructuras burocráticas que complican el transporte internacional.
El subsecretario de Transporte de la Provincia, Hermes Almirón no ahorró críticas contra la Dirección Nacional de Aduanas y sus empleados, tanto por el paro anunciado para los días 10, 11 y 12 de julio, en exacta coincidencia con la visita del Papa Francisco a Paraguay; cuanto por la decisión de Aduanas de exigir que la prestataria del tren de pasajeros pague a los aduaneros, en concepto de “servicio extraordinario”, por los días feriados y fines de semana trabajados.
“No salimos de nuestro asombro ante esta actitud asumida por los empleados de Aduanas, ante la particularidad de las fechas que eligieron para ir al paro y ahora tenemos un doble problema
, porque han generado una situación que hace que el tren no pueda funcionar en fines de semana y feriados”, lamentó el funcionario.
Consideró que los aduaneros “tienen a la población de rehén” y destacó que hay muchas personas para quienes la llegada del Papa es un acontecimiento trascendental, pero no saben si van a poder pasar la frontera porque no saben si los aduaneros los van a dejar pasar.
“Son empleados del estado federal que funcionan como si fueran tropas de ocupación, terminamos dependiendo de los estados de ánimo o de las reglas normativas que nos imponen ellos. Estamos ante esta situación en la que Aduana resuelve quien cruza y qué hora y a qué costo”, señaló en diálogo con Radio República.
En relación al conflicto que determinó la suspensión del tren a Encarnación en fines de semana y feriados, el funcionario provincial destacó que los aduaneros tienen un “régimen especialísimo y casi de privilegio. Cobran sueldos extraordinarios, eso es de público conocimiento, aparte del aguinaldo, cobran sueldos extraordinarios a los largo del año”.
Recordó que hay legislación que establece que el servicio de transporte público de pasajeros debe ser asimilado al régimen de Transporte Vecinal Fronterizo y por lo tanto no se debe pagar a Aduanas por servicios extraordinarios. “Considerar que el concesionario del servicio de trenes tendría que pagar por el servicio de la gente que trabaja en la oficina de Aduanas, es una cosa muy absurda. Resulta que si viajás en colectivo es tráfico vecinal fronterizo y no pagás servicio, pero si viajás en tren, que también es un servicio público, sí hay que pagar el servicio extraordinario”, argumentó.
Indicó que si el mismo criterio se trasladara a otras áreas de la administración pública se podría llegar al absurdo de que si uno llegara al hospital fuera de horario laboral de la administración pública, habría que pagar al médico o a los enfermeros un cargo extra para ser atendido.
Señaló además que en su función de vicepresidente del Concejo Portuario Argentino, participó de muchas reuniones con transportistas y funcionarios de la Nación y de varias provincias, en las que se planteó que los requisitos burocráticos de Aduanas representan una traba importante para el transporte de cargas. “Es un tema que tratamos hasta con Ricardo Echegaray (titular de la AFIP), el problema es que la Aduana en los puertos, en vez de ser un organismo de contralor, pero facilitador de transporte de cargas, se las ingenia para armar unas estructuras jurídicas que complican todo”, aseguró.
JRC EP
