Esas fueron las palabras de los empresarios de la noche durante una reunión que mantuvieron con el concejal Julio Vivero donde se habló sobre la reforma del código de nocturnidad. El edil manifestó, que los comerciantes aseguran que se trata de problemas de oferta y demanda.
Julio Vivero, concejal (LT4)
Vivero agregó que “ellos –los empresarios- plantean que los chicos no quieren ir a lugares donde no se vende bebidas alcohólicas, que es un problemas de demanda y no de oferta, entonces, termina siendo una actividad que se va apagando con el tiempo”.
Detalló que la idea de la reforma básicamente tiene que ver en primer lugar con una norma que incluya todas las actividades nocturnas. Otras de las cuestiones son los horarios, la venta de bebidas alcohólicas, la habilitación y requerimientos para dichos lugares. Por otro lado “lo que tiene esta nueva norma, es que hay todo un capítulo destinado a lo que es la actividad de los llamamos boliches bailables, entonces, dentro de esas actividades tenemos un capitulo que habla de los menores, establece por un lado, algo que ya estaba dentro de nuestro código, donde hay lugares permitidos y no permitidos para menores. Los lugares permitidos deben cumplir ciertos requerimientos y son más exigentes desde el punto de vista de la no venta de bebidas y el horario”, precisó.
Contó que dentro de la norma se plantea un horario para menores de 14 a 18 años. Los boliches bailables podrán tener hasta las 1 de la mañana abierto para adolescente. En cual no podrán vender bebidas, y no podrán no ingresar mayores de edad.
Por otra parte Vivero dijo que “en la reunión con empresarios del sector, ellos plantean que los chicos no quieren ir a lugares donde no se vende bebidas alcohólicas, es uno de los problemas de demanda y no de oferta, entonces, termina siendo una actividad que se apagando, primero sale bien, la segunda más o menos y la tercera no va nadie”.
En esa línea se planteo que “si los jóvenes no pueden ingresan a ningún lado, tarde o temprano van a ir a lugares que estén permitidos para los menores, la franja horaria no es el problema”.
Asimismo contó que una de las cosas que se planteó como solución es que “un boliche haga el esfuerzo de trabajar con los menores. Pero ellos plantean que no pueden bancar la actividad solo con la entrada, entonces surgió la idea de ir rotando, un boliche tiene el matiné una semana, la otra semana otro, en ese caso tarde o temprano podíamos posicionarlo sin demasiado costo para el empresario”.
Agregó que “el desafío es cómo logramos una norma que permita que la noche sea segura para los distintos sectores etarios y que podamos vivir en pleno disfrute la ciudad y que sea atractiva no solo para nosotros, sino para la gente que viene de afuera”.
Por último sostuvo que “lo que no se negocia es el alcohol y los chicos, pero sí tenemos que hacer en vez de excluirlos de la noche, generar espacios para ellos”.
LA-LT4 Red Ciudadana
Brignole sobre el Código de Nocturnidad: “No sirve de nada cambiarlo, si no hay decisión política de hacerlo cumplir”
