Juzgarán en Oberá a una joven que parió a su bebé y lo tiró a la letrina

Este miércoles habrá un debate importante en el Tribunal Penal Nº2 de Oberá. Juzgarán a Nancy Da Rosa (21). Ella afronta una acusación por “homicidio calificado agravado por el vínculo”. Se cree que dio a luz en precarias condiciones en un paraje de Aristóbulo del Valle y luego arrojó a una letrina al niño ocasionando su muerte.
Se trata de un hecho ocurrido el 20 de agosto del 2014 en paraje San Lorenzo.
De acuerdo con lo que se determinó en la instrucción de la causa, una mujer encontró a su hija de 20 años con mucho dolor en la zona abdominal y con sangre en sus partes íntimas. Era Nancy, quien había dado a luz hace pocos minutos pero nadie sabía de esa situación. La llevaron al hospital y se conoció que había sido madre. Pero tomó intervención la Policía porque se supo que ella había arrojado al bebé en la letrina.
Es un caso complejo y envuelto en un contexto social de necesidades.
Por esos los jueces deberán analizar los testimonios y determinar si le cabe un atenuante a la muchacha.
Al debate la joven llega detenida. Desde que sucedió la muerte del bebé se encuentra alojada en la Unidad Penal de Villa Lanús en Posadas.
Según la calificación, “homicidio calificado por el vínculo”, podría recibir una pena de prisión perpetua.
Lo que se tratará de dirimir en el juicio es si la acusada actuó en una situación emocional violenta porque no se descarta que el embarazo haya sido producto de una violación.
Los jueces serán José Rivero, Francisco Aguirre y Amalia Avendaño. La Fiscalía estará a cargo de la doctora Estela Salguero, mientras que la defensa de la imputada será la abogada oficial Graciela Abdolatif.

El emblemático caso Tejerina
El caso más emblemático en relación a casos como el que se juzgará en Oberá es el de la joven jujeña Romina Tejerina.
Ocurrió en 2003 y tomó trascendencia a nivel nacional. El 23 de febrero de ese año, tras ocultar su embarazo, Tejerina dio a luz a una niña en el baño de su casa de San Pedro de Jujuy. En ese mismo lugar, la joven -de entonces 19 años- apuñaló a la beba tras meterla en una caja de zapatos, que murió dos días después en en el hospital Guillermo Paterson, donde se le dio el nombre Milagros del Socorro. Tras esto, la chica fue detenida.
Según la muchacha, el embarazo fue producto de una violación sexual que sufrió el 1° de agosto de 2002 a la salida de un boliche. Ella siempre lo ocultó, por miedo, entre fajas y laxantes. La única que sabía de su embarazo era su hermana Érica, a quien pidió no contar nada. La joven fue condenada a 14 años de prisión en un juicio en que la fiscalía había pedido la cadena perpetua, y la defensa su absolución. La pena -impuesta en junio de 2005- fue ratificada años después por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Ya recuperó la libertad.

Dos causas que terminaron en absolución
Durante 2006, dos mujeres que dieron muerte a sus bebés en el momento del parto fueron absueltas por tribunales de Entre Ríos y Córdoba respectivamente porque consideraron que «no comprendían la criminalidad del acto» o bien porque contemplaron «la violencia de la que fueron víctimas».
El 24 de octubre de ese año, una joven de 23, acusada de dejar morir a su hijo, luego de parir en el inodoro y abandonar al bebé dentro de un bolso, fue absuelta por la Justicia de la ciudad de Paraná.
La decisión fue adoptada por los jueces Juan Ascúa y Felipe Celli, de la Sala l de la Cámara del Crimen quienes interpretaron que la joven no comprendía la criminalidad de los hechos, mientras que el tercer integrante del tribunal votó por la condena a cadena perpetua, que había solicitado el fiscal Juan Carlos Almada, por el delito de homicidio agravado por el vínculo.
Un mes después, un tribunal de Villa Dolores absolvió por mayoría a Elizabeth Díaz, acusada de matar a su hija recién nacida, concebida tras una violación.
El tribunal determinó absolver a la joven “por el hecho que se atribuye en la requisitoria fiscal como presunta autora del delito de homicidio calificado por el vínculo”. Se trata de una figura penal que contempla hasta la pena de reclusión perpetua, pero los padecimientos sufridos por la joven, como el abuso sexual, tuvieron incidencia en el fallo.

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