Hace diez días pasó por Oberá el «circo» del Súper TC2000, donde Matías Rossi resultó triunfador. Ese fin de semana también estuvo acelerando en el Autódromo Ciudad de Rosamonte otro personaje más famoso que el misil de Del Viso, aunque en otro ámbito: se trata de Cristiano Rattazi, uno de los empresarios más importantes del país.
Bisnieto del fundador de Fiat, Giovanni Agnelli, y titular -y dueño- de la filial Argentina de la empresa automotriz, Rattazzi es uno de los dirigentes empresarios más notorios del país y uno de los pocos que se anima a manifestar, en voz alta, sus desacuerdos con el Gobierno.
El fin de semana estuvo en Oberá junto a otra de sus grandes pasiones, las carreras de automóviles. Con 66 años, el empresario corre en la categoría Fiat Punto Abarth, una «telonera» del SúperTC2000.
A diferencia de la Fórmula Renault, otra categoría «telonera» del SCT2000, donde corren chicos de menos de 20 años que sueñan con llegar a las máximas categorías de los fierros en el país, la Fiat Punto Abarth está poblada de «veteranos». En su mayoría, empresarios o profesionales que se pueden dar el lujo de cumplir con su hobby.
Misiones Online entrevistó a Rattazzi luego de la carrera, en el salón VIP que la categoría instala en la zona de boxes, un lugar con un catering de primer nivel donde los pilotos van antes y después de las carreras. Allí estaba Rattazzi, todavía agitado luego de haber corrido las 18 vueltas y escalar algunas posiciones desde el último lugar, donde largó.
Ya a punto de partir a Buenos Aires, el empresario se prestó amablemente al diálogo:
-Se lo ve cansado…
-Estás media hora en tensión, es fuerte, cansa…
-¿Le gustó la carrera que hizo?
-Más o menos, arranqué ultimo cambiando de auto y sí, por lo menos me divertí hasta pasar algunos puestos, los autos son muy parejos, entonces si encontrás a alguien y llegas a pasar perdés mucho tiempo, y no hay nada que hacer…
-¿Qué le pareció el circuito?
-Me encanta, ya corrí, es muy lindo, hay cosas para mejorar, toda esa tierra, y yo mejoraría la curva por la que se entra a la recta opuesta, esta demasiado peraltada hacia fuera. Demasiados autos se van ahí.
-¿Cuándo arrancó con esto de correr?
-Cuando era chico corría en serio, ahora no (risas). (A los 20 años fue piloto de los equipos oficiales de rally de Lancia y Fiat en Europa, y estuvo a punto de probar una Ferrari en la época de Nikki Lauda)
-¿Va a fondo?
-Trato de ir bastante a fondo, pero hasta ahí, a los 66 años no soy el mismo que era a los 20.
¿Tiene preparación especial?
-No le dedico, habría que hacerlo hoy en día simulador, sirve mucho y no lo hago, y estar en forma.
-¿Qué le pareció Misiones?
-Oberá es una ciudad muy ordenada, muy linda, los caminos se están renovando. No me gustan esos lomos de burro.
-¿Y Misiones para Fiat como mercado?
-Es un mercado bueno, pero en este momento no hay interés en vender autos porque no lo podemos pagar, porque no nos dejan importar a menos que hayamos exportado lo mismo, no nos dejan desbalancearnos y es una industria importadora, hasta para fabricar el auto es 50 por ciento importado, a veces tenemos que parar la producción.
-¿Cómo sigue su carrera de automovilista?
-Vamos a las Termas de Río Hondo, un circuito muy seguro, muy bien hecho.
-¿Correr fue su gran pasión?
-Cuando tenia 20 años, llegue a correr en el equipo Lancia en Italia, vine aca gante carreras. Siempre dije que si me tenía que morir a los 35 hubiese sido sólo corredor, un dia dije que iba a ser empresario me fui a estudiar a Harvard y deje de correr.
-¿Qué era lo que más le atraía de las carreras?
-Todo, todo, todo, la adrenalina, manejaba bien especialmente en circuitos y me gustaba. Me sentía bien, ganaba.
-¿Vio la película «Rush» sobre la rivalidad de Nikki Lauda y James Hunter?
-Si, me encantó, muy bien hecha, yo a Nikki Lauda llegué a conocerlo mucho por Ferrari, era un gran corredor y es una gran persona.
MB
EP
