Lucas, de 13 años, salvó su vida de milagro luego de que un vecino lo atacara a tiros por molestarlo en su casa. «La bala la tiene alejada en la cervical», detalló la mamá de la víctima.
El autor del disparo es un hombre de 52 años, que fue detenido por la Policía local. El violento incidente ocurrió este lunes por la mañana en un domicilio situado sobre la calle 395 al 2.500 de Quilmes (Buenos Aires).
En ese lugar, el chico habría tocado el timbre de la casa y escapó en varias ocasiones, incurriendo en la antigua broma en forma de juego practicada por niños y adolescentes desde principios del Siglo XX.
La situación habría ofuscado al propietario de la casa, quien esperó que el menor vuelva a concretar el mismo «chiste» con un arma de su propiedad cargada. El vecino esperó el timbre y salió rápidamente a la calle, momento en el que vio al menor escapar y sin mediar palabra efectuó un disparo que impactó en la nuca del chico.
El menor cayó gravemente herido en el pavimento y fue trasladado a la Clínica del Niño, donde quedó internado en estado reservado. Otros vecinos del lugar, que se congregaron frente a la casa del agresor, llamaron a la Policía y exigieron su detención, la que fue llevado a cabo por efectivos del Comando de Patrullas Comunal (CPC) local.
El detenido fue trasladado a la comisaría de la zona, mientras que también se secuestró un revólver de calibre 22 y marca Bagual, el cual tenía una vaina servida en el tambor.
