Los Halcones Rojos hicieron mejor las cosas, sacaron ventajas claves y no le permitieron al Celeste que se recupere jamás. La defensa de los cordobeses fue muy efectiva e intensa. Oberá Tenis Club (OTC) jugó desordenado y desesperado, lo que le llevó a tener muchas pérdidas. El marcador final fue 77-89 y serie 2-3 para San Isidro.
OTC se despidió de esta temporada del Torneo Nacional de Ascenso (TNA), pero dejó una imagen más que positiva por lo que generó en su gente que en la noche del martes, por fin acompañó al equipo.
San Isidro, con jugadores experimentados en el TNA y muchos con pasado en la Liga Nacional hizo pesar la trayectoria de los mismos, que en momentos claves, lo hizo sentir y en contra partida, el Celeste pecó de inmaduro en algunos aspectos, jugando con apuro, no eligiendo el mejor camino al momento del ataque y defendiendo displicente dejado casi siempre la segunda opción al rival.
El primer parcial fue parejo, OTC solamente estuvo al frente al inicio cuando el marcador indicaba 2-0 con un doble de Andrés Mariani que jugó de titular, luego San Isidro dominó el tanteador siempre, 20-26 fue el parcial inicial.
Los segundos diez minutos de juego marcaron un despegue importante de la visita que llegó a sacar una diferencia de 24-41 a base de defensa y un ataque amplio y efectivo con tres triples de Elias Saad, más otros de Ferrini, Esceverri y Lozano. Los dirigidos por Zurita reaccionaron sobre el final achicaron la diferencia y aprovecharon que la visita se cargó de faltas y cerró 35-42 abajo.
Luego del descanso largo OTC salió con otra actitud, mucho más combativa y en busca de revertir el resultado, estuvo muy cerca, quedando 44-47 y con el ataque a favor, pero nuevamente las malas decisiones y la excesiva búsqueda de jugar con Brezzo hicieron que el rival espere agazapado en defensa y ofreciendo el tiro externo al Celeste rubro en el que no estuvo para nada efectivo, pero se acercó en el marcador 59-64.
Alentado por su público, el representante misionero buscó aprovechar la localia, pero nuevamente la experiencia de San Isidro marcó la diferencia en zona pintada y desde el exterior aparecieron las conversiones de Saad, Esceverri y Moya en zona pintada, OTC se fue desluciendo y el público comenzó e impacientarse porque veía que al intento de reacción los cordobeses volvían a estirar la diferencia a la que jamás pudieron hacer frente. El Celeste se vio superado en todas las líneas por el rival que lo ganó con justeza y por eso perdió 77-89.
