«Algo nunca visto, algo sin precedente», estas y muchas más eran la expresiones de la gente que visitó el Cerro Monje en San Javier en esta Semana Santa. El acceso refaccionado recientemente ayudó pero no dio abasto a los más de 20.000 peregrinos que visitaron uno de los lugares religiosos más emblemáticos de Misiones en Semana Santa.
En el Cerro Monje en San Javier, la leyenda y la fe volvieron se unieron ayer, convocando a miles de peregrinos que recorren el Vía Crucis.
El obispo Damián Santiago Bitar destaco la decisión desde la parroquia, al veto en la venta de bebidas alcohólicas “es una decisión importante para que este lugar místico no se desvirtué, estamos trabajando desde la Diócesis de Oberá para que en ninguna fiesta patronal se venda bebidas alcohólicas y es importante comenzar aquí en el Cerro”, dijo a FM Alto Uruguay.
Con el correr del tiempo se fue convirtiendo en un lugar de atracción para una multitud heterogénea y creyente, que llega hasta el Cerro Monje en los días jueves y viernes Santo, personas que se sintieron aliviadas de sus males, llevadas por la Fe, otras deseosas de hacer conocer la leyenda y la incomparable belleza del paisaje que desde el cerro se divisa.
El acceso al Cerro fue un caos, las refacciones ayudaron ampliamente, pero la cantidad de vehículos que circularon superó cualquier expectativa.
El padre Obispo Santiago Bitar, en entrevista a Fm Alto Uruguay destacó la gran cantidad de gente que visitó el Cerro Monje y el sentimiento de Fe que se transmitió a través de la representación del Vía Crucis Viviente “este grupo de niños, de jóvenes, de adultos, que participaron de la Pasión de Cristo no hicieron teatro sino que han puesto su corazón en la representación, han vivido intensamente y eso se transmite a la multitud, han puesto su corazón, creo también que estamos desacelerando motores, y este lugar es una invitación para la reflexión, aquí es lindo ver gente de todos lados y de distintas características”, agregó.
Por otro lado destacó la decisión desde la parroquia, al veto en la venta de bebidas alcohólicas “es una decisión importante para que este lugar místico no se desvirtué, estamos trabajando desde la Diócesis de Oberá para que en ninguna fiesta patronal se venda bebidas alcohólicas y es importante comenzar aquí en el Cerro”.
Con relación a las reformas que se están dando en el Cerro Monje comentó que “vamos dando pasos importantes, desde la firma de convenio que realizamos hace dos años aquí mismo en el Cerro, conjuntamente con vialidad y el municipio de San Javier, se está poniendo en valor este lugar, sin ser tan ostentoso, sino que resguardando este hermoso paisaje, y la historia”.
Para finalizar, el titular de la Diócesis de Oberá instó a los jóvenes a que no tengan miedo de abrir el corazón, y que participen y «sigan haciendo lío», como dijo el papa Francisco, en el buen sentido de la Palabra. ( José Rigo 5 sentidos en Red).
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