Carolina Zacarías, la joven de 21 años que denunció un abuso en un hospital de Tigre ( Buenos Aires) dio detalles de su calvario. «Me indigna que el camillero haya seguido trabajando», se quejó.
La joven sufrió una severa descompensación el fin de semana en un boliche, tras lo cual fue llevada inconsciente a un hospital, en el que el empleado se habría aprovechado de su estado. El hecho fue descubierto por el personal de seguridad del nosocomio, que casi lincha al hombre.
«El viernes a la noche la chica fui a bailar, en compañía de mi hermano y un amigo al boliche Brujas. Es un lugar bueno. Tomé un trago y luego compre otro, pero cuando estaba por la mitad, lo dejé para ir a bailar. Al regresar, tomé un vaso. No sé si era el mismo. Lo cierto es que me descompensó y no recuerdo más nada. Recién recobré la conciencia a las 7 de la mañana del sábado, arriba de una camilla y con golpes. Estaba en el Hospital de Pacheco», contó la joven.
La joven se retiró y regresó a su casa. Así pasó el sábado y parte del domingo.
«Ese día una mujer se presentó en mi casa una mujer, que pidió hablar con mi mamá. Esta señora, que es empleada de seguridad del hospital, le contó que en la madrugada del sábado la chica estaba inconsciente en la camilla y un auxiliar la abusó sexualmente. Toda la escena fue observada por el circuito cerrado. La gente de seguridad intervino cuando el sujeto se disponía a violarla. Le había sacado el short, después de abusarla. Le hizo de todo», relató.
La empleada de seguridad del hospital le contó a la madre de la chica que la víctima arribó al lugar en una ambulancia del servicio de emergencias, luego de recogerla de la calle. Se presume que la joven, descompuesta, salió del boliche y en un momento se desmayó. En ese marco, alguien habría llamado para pedir asistencia.
Luego de la revelación de la empleada, la víctima realizó la denuncia en la Comisaría de la Mujer de Tigre. Desde ese momento, la investigación recayó en la Unidad Fiscal de Instrucción de la zona.
