Terapistas comunitarias comenzaron las actividades del año con un taller vivencial para «liberar las emociones»


Para entrar en el círculo y participar en la experiencia sanadora, afuera se dejan títulos y calzados. Así comenzó el primer taller vivencial del año «Liberando emociones», organizado por integrantes de la asociación civil Salud Comunitaria, conformada hace más de dos años en Posadas. «Es algo nuevo para la comunidad, desde la asociación civil Salud comunitaria organizamos la primera actividad del año más entre amigos y enlazamos la comunidcación para desarrollar esta actividad», dijo Carmen «Teura Roja» Fernández, una de las integrantes de dicha asociación creada hace unos años, desde la Escuela de Enfermería Universitaria de la UNaM.

Terapistas
En el primer taller del año, terapistas de salud comunitaria, Nora Jacquier, Carmen «Teura Roja» Fernández y Luisa Santos.

 

Y agregó que esperan que el próximo taller que van a convocar en forma gratuita como siempre «sea más abierto para que pueda acceder a esta posibilidad, más cantidad de personas y tiene que ver con aquello que creemos que está todo bien pero en realidad no está del todo bien, porque en el trajín diario hay muchas cosas que tenemos que resolver, las emociones que se van acumulando y aparecen los dolores en el cuerpo porque las tenemos calladas».

Carmen «Teura Roja» Fernández. (Audio Misiones on Line)

En el primer ejercicio se trabajó los chakras, porque «lo importante es estar consciente de lo maravillosos seres que somos todos”, dijo Fernández, y la consigna es el dar y recibir, s trabajar el perdón, eliminar las angustias que nos traen dolores de panza terribles, expresar y sacar eso que queremos y también ser m{as consciente con este día a día este presente y la maravillosa posibilidad que tenemos los seres humanos.

Teura Roja
Carmen «Teura Roja» Fernández anticipó próxima reunión comunitaria para continuar la terapia sanadora, en lugar a definir.

 

Esta actividad realizada en un espacio particular y con amigos y amigas se va socializar de manera más amplia, a través de convocatorias a través de los medios para que más personas puedan vivenciar las experiencias sanadoras.

El grupo estuvo trabajando en el barrio San Lorenzo y Alta Gracia y este año continuarán en el paraje San Isidro, con la comunidad del barrio Los Oleros, y “ hay que ver cómo ellos llevan más de dos años haciendo las rondas comunitarias y cómo esta comunidad ha sido consciente de este trabajo que se realiza una vez cada 15 días”, dijo la terapista.

Qué es la terapia comunitaria

En el primer ejercicio de práctica del taller se trabajaron los chakras, para quienes no conocían se fue explicando en un gráfico dónde están ubicados estos centros energéticos del cuerpo humano. «Lo importante es estar consciente de los maravillosos seres que somos todos”, dijo Fernández, y la consigna «es el dar y recibir,  trabajar el perdón, eliminar las angustias que nos traen dolores de panza terribles, expresar y sacar eso que queremos y también ser más consciente con este día a día, este presente y la maravillosa posibilidad que tenemos los seres humanos de sanarnos».

Esta actividad realizada en un espacio particular y con amigos y amigas se va socializar de manera más amplia, en convocatorias a través de los medios para que más personas puedan vivenciar las experiencias sanadoras.

El grupo estuvo trabajando en el barrio San Lorenzo y Alta Gracia y este año continuará en el paraje San Isidro, con la comunidad del barrio Los Oleros, y “ hay que ver cómo ellos llevan más de dos años haciendo las rondas comunitarias y cómo esta comunidad ha sido consciente de este trabajo que se realiza una vez cada 15 días”, dijo la terapista.

Los orígenes de la asociación de terapistas comunitarias

NORA
Nora Jacquier, presidenta de la asociación civil Salud Comunitaria, trajo la formación desde Brasil.

Nora Jacquier, terapista comunitaria.

El fundador de la terapia comunitaria es el doctor Adalberto Barreto, un brasileño que trabaja en las favelas en Fortaleza, Brasil, y en Misiones se impulsó desde la Escuela de Enfermería de la UNaM y el hospital de Pediatría. De hecho, entre las artífices están Nora Jacquier y Luisa Santos, ambas enfermeras de la UNaM quienes trajeron a la Argentina la formación de terapeutas comunitarias que la comenzaron a expandir entre colegas y profesionales.

Nora Jacquier explicó la primera técnica realizada al comenzar el taller vivencial, y que fue de “precalentamiento para el conocimiento por uno mismo, recordar quienes somos nosotros mismos, fue para entrar en clima porque el trabajo fuerte estuvo dado por la segunda técnica que es una técnica teórico-vivencial, y lo teórico no es desde el conocimiento científico enciclopedista acumulado sino aquel que produce el sincretismo cultural, en el cual todo aquello que es útil para sanar y curar las heridas, pero por sobre todo a través del propio autoconocimiento donde cada ser humano se hace consciente de sí mismo y donde puede él mismo ir decodificando el lenguaje del cuerpo, eso que está guardadito y que la memoria celular puede reconocerlo cuando se siente algún malestar de algo que lo inquieta”.

El cuerpo nos da señales y nos da signos, hay una alarma que se prende y no lo queremos escuchar, por eso decimos que la integración mente cuerpo es muy importante, agregó la experta.

Dijo que han firmado un convenio entre la asociación y la facultad de Ciencias Exactas, Químicas y Naturales de la UNaM, en principio con el objeto de formar terapeutas comunitarias en la Argentina, es “una competencia o habilidad que tienen los profesionales de la salud , pero extendida a la comunidad, en la medida que pasan por una formación básica y que pue en a partir de eso trabajar en encuentros de terapia comunitarias, en Brasil le llaman ronda comunitaria”, sostuvo.

Ese fue el objetivo inicial principal de la asociación, “ pero una vez que nos convertimos en expertas y formadoras de salud comunitaria también podemos hacer extensivo a la comunidad y los encuentros de terapia comunitarias sino hacer también talleres de “cuidando al cuidador , porque esta técnica vivencial forma parte de todo un paquete de técnicas teóricos vivenciales que permiten mayor autoconocimiento para un mayor bienestar”, aseguró agregó.

Los encuentros de terapias comunitarias siempre son gratuitos porque es un servicio a la comunidad, aclaró Jacquier. Y aclaró que no trabajan con las patologías mentales sino con el sufrimiento humano por distintas causas que pueden ser conflictos por razones laborales, con la pareja o con los vecinos.

El anhelo de la asociación es tener un espacio propio donde realizar los talleres, ya que por ahora van por los barrios y en distintos lugares como parroquias y otros, además del Hospital. Para comunicarse con la asociación el correo es [email protected], y la referente en el área de comunicación es en el facebook Teura Roja.

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