Reflexión del pastor Decena: La preocupación

Jesús habla del problema de la preocupación ansiosa y negativa como algo que debemos sacar de nuestras vidas. También menciona las fuentes básicas de la preocupación humana: por la vida, por la comida, por la apariencia, por la ropa, etc. Veamos qué nos dice la Palabra de Dios para que dejemos de preocuparnos.

 

Mateo 6:25  Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?

Mateo 6:26  Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?

Jesús habla del problema de la preocupación ansiosa y negativa como algo que debemos sacar de nuestras vidas. También menciona las fuentes básicas de la preocupación humana: por la vida, por la comida, por la apariencia, por la ropa, etc. Y todo esto es absolutamente humano y actual.

Tampoco nos dice que vivamos irresponsablemente, o que no seamos previsores, venos por ejemplo que la Biblia nos enseña a aprender de la hormiga que trabaja en verano para el invierno, no es el prevenir sino el predecir lo malo lo que está prohibido.

La preocupación que prohíbe la Biblia es pariente del temor y cercana al pánico.

 

CONSECUENCIAS DE LA PREOCUPACIÓN.

La preocupación no sirve absolutamente para nada. Para todas las cosas debajo del sol hay cura o no hay ninguna. Si puede hacer algo no se preocupe pero haga lo que tiene que hacer… y si no tiene cura por más que se preocupe no habrá cura. La preocupación nunca quitó una carga, nunca solucionó un problema. Es como el león que no destruye tanto la presa, como sí lo hacen las pequeñas hormiguitas, así es la preocupación, corroe lentamente en forma profunda.

La preocupación apaga la luz espiritual… fíjese que cuando entra el que vive preocupado es como que se apaga la luz, se va y se enciende la luz. La preocupación es como una enfermedad contagiosa.

La preocupación es una fe negativa, y lamentablemente se ve el cumplimiento. Está visto que el negativo tiene una fé terrible de que algo malo va pasar. Como dicen en Job…

Job 3:25  Lo que más temía, me sobrevino; lo que más me asustaba, me sucedió.

La preocupación ofende a Dios, porque es como que no estuviera y como si nunca nos hubiera prometido protección. El  Señor espera que veamos siempre un futuro luminoso.

Marcos 4:37  Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba.

Marcos 4:38  Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?

Marcos 4:39  Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza.

Marcos 4:40  Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?

Jesús se sorprende de la tremenda preocupación de sus discípulos. Cuando nos preocupamos parecemos incrédulos, dice que esas cosas buscan ansiosamente los incrédulos. Pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de esas cosas, por eso una de las características del creyente en Cristo debe ser la Confianza en Dios y la paz que sobrepasa el entendimiento.

La preocupación negativa nos impide dar frutos espirituales.

 

DEBEMOS DAR FRUTOS, LA PALABRA DEBE SER EFECTIVA CON NOSOTROS.

Mateo 13:22  El que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa.

Deberíamos alcanzar este grado de paz:

Salmos 27:3  Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado.

Que tengas una semana de victoria, y Dios te bendiga y te de mucha Paz.

 

Pastor Guillermo Decena, Centro Familiar Cristiano Eldorado.

Prédicas en vivo los miércoles y domingos 20 horas, a través de www.centrofamiliarcristanoweb.org

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