Tareferos de Montecarlo levantaron protesta por diez días

Los trabajadores rurales que mantenían piquetes frente a la sucursal del Banco Macro de Montecarlo y amenazaban con cortar la ruta 12, abrieron una tregua de diez días a la espera de resultados de gestiones iniciadas por el intendente César Barreto. Reclaman la devolución de asignaciones familiares retenidas por Anses entre 2008 y 2009. La deuda que exigen supera los tres millones de pesos. Afirman que más de 750 personas sufrieron las retenciones. El expediente está en manos de la justicia, que en primera instancia ya le dio la razón a los tareferos, pero el tema quedó estancado en la Cámara de Apelaciones.
El intendente de Montecarlo César “Chun” Barreto indicó que los tareferos que reclaman la devolución de asignaciones familiares levantaron hoy la manifestación que mantenían sobre avenida Libertador, frente a la sucursal del Banco Macro de la localidad del Alto Paraná. La protesta lleva más de seis años, pero desde mediados de enero se había reavivado. En las últimas semanas los trabajadores contaron varias veces avenidas de Montecarlo y amenazaban con interrumpir el tránsito sobre la ruta 12, tal como lo hicieran en años anteriores.
Barreto explicó que hay fallos de primera instancia que dan la razón a los tareferos, que luego fueron apelados por la ANSES pero todavía hay varios expedientes pendientes de resolución en la Cámara de Apelaciones. Aseguró que están golpeando puertas para que la Cámara falle lo más rápido posible y los trabajadores puedan disponer del dinero que les fuera descontado de modo ilegal.
“Hay gente que perdió mucho dinero y hoy apenas consigue llegar a fin de mes. Estamos en las últimas semanas para que esto se haga realidad”, auguró Barreto.
Advirtió empero que de no haber una respuesta favorable por parte de la justicia, volverían a la protesta en diez días.

Antecedentes
El organismo que conduce Diego Bossio retuvo durante dos años, entre 2008 y 2009, las asignaciones familiares a alrededor de 770 trabajadores, según estimaciones del Sindicato de Tareferos de Montecarlo, después de haber detectado una estafa que venían llevando adelante empresas contratistas en complicidad con “presta firmas” que figuraban como tareferos pero que en realidad nunca habían pisado un yerbal. En vez de profundizar la investigación y castigar solamente a los estafadores, la Anses optó por hacer tala rasa y quitarle los beneficios a todos los que figuraban como trabajadores de las contratistas implicadas en la estafa, así terminaron perjudicados tareferos que nada tenían que ver con la maniobra fraudulenta.
Según estimaciones del sindicato, alrededor de tres millones y medio de pesos que deberían haber cobrado los tareferos, quedaron retenidas en la Anses.
De los 770 tareferos que, según el sindicato, fueron perjudicados, 128 lograron judicializar sus reclamos en ocho causas que tramita el juzgado Federal de Eldorado. Uno de esos expedientes recibió el visto bueno tanto en primera instancia como en la Cámara de Apelaciones, mientras que los restantes duermen en los anaqueles de la Cámara.

JRC PP

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