Hay dos detenidos por el asalto a la casa del médico y están tras los pasos del líder de la banda

Esta mañana, desde la Policía indicaron que era inminente que hubiera novedades. Y las hubo al filo del mediodía. Investigadores de la Unidad Regional Dos detuvieron a dos sospechosos por el robo a mano armada que sucedió el jueves por la noche en la residencia del conocido médico obereño Sergio Nercolini. Cuando la banda de seis delincuentes irrumpió en la residencia, el profesional no se encontraba, sí su esposa, su hija y su nieta de seis meses. Los ladrones huyeron con 11 mil dólares, joyas, teléfonos celulares y una tablet.
Los arrestados por el atraco en la residencia del lote 43 son Francisco B. (23) y Diego B. (24), informó la Policía. También hubo un demorado, pero con el correr de las horas se determinó que no tendría relación con la gavilla.
Los allanamientos se concretaron entre los kilómetros 11 y 13, cerca del cruce entre las rutas nacional 14 y provincial 103. Esa zona queda en inmediaciones del escenario del robo.
Además de las detenciones, ordenadas por el juzgado de Instrucción Dos, subrogado por Alba Kunzmann de Gauchat, los detectives secuestraron una pistola de aire comprimido, una capucha roja, un cubrecuello azul, dos machetes y prendas de vestir. En un malezal, los uniformados encontraron las joyas, los celulares y la tablet. La Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional II continúa con las tareas tendientes a dar con el dinero sustraído y detener a los demás integrantes de la banda que perpetró el robo.
Por estas horas buscan a un delincuente con antecedentes (incluso una condena por homicidio), apuntado como el ideólogo del atraco.
Por lo que pudieron averiguar los investigadores, los malvivientes estaban al tanto de todos los movimientos de la familia de Nercolini y por eso golpearon cuando el médico estaba de viaje y las mujeres de la casa se encontraban solas.

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El atraco sucedió cerca de las 21, en el lote 43, ubicado a unos cinco mil metros de la zona urbana de la Capital del Monte. Allí tiene una residencia el doctor Sergio Nercolini, quien al momento del robo se encontraba en Buenos Aires.
En la casa se encontraba la esposa del facultativo, Susana G. (54) junto a su hija Soledad, de 29, y la beba de esta última, de seis meses. De manera imprevista irrumpieron seis personas encapuchadas, armadas con machetes, cuchillos y un arma de fuego. Maniataron a una de las mujeres con un cable y llevaron a la otra a recorrer distintos sectores de la casa exigiendo dinero en efectivo.

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La vivienda cuenta con un sistema de cámaras de seguridad. Todo el material que grabó el equipo ya está en poder de los investigadores policiales. Allí se vería de manera íntegra cómo fue el atraco.
De acuerdo con la denuncia de las damnificadas, los ladrones se llevaron 11.000 dólares, una tablet, dos celulares y un iPhone. Una vez que tomaron el botín, huyeron a pie.
Al rato llegó a la casa un hijo de Nercolini, quien de inmediato avisó a la Policía. El hombre comentó que tenía previsto venir antes, pero como no se pudo desocupar arribó más tarde. Justamente quería estar en la residencia antes de que entrara la noche, porque días previos sus familiares le habían comentado que habían escuchado ruidos sospechosos, que motivaron que los perros ladraran sin parar. Se especula con que los malvivientes habrían merodeado el lugar y estaban buscando el momento oportuno para actuar.
El alerta de Nercolini hijo llegó en el momento en el que la Unidad Regional Dos estaba desplegando un operativo de seguridad con 26 hombres y cinco vehículos. Los primeros en llegar a la casa donde sucedió el asalto fueron los efectivos de la División Seguridad Vial. Después se sumaron otras dependencias.

MAS- EP

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