Dos ancianos de 80 y 89 años fueron encontrados muertos en su casa de Wilde, partido de Avellaneda, provincia de Buenos Aires. Si bien se cree que ambos fallecieron por causas naturales, uno de ellos habría convivido con el cadáver de su hermano al menos dos meses.
Lo que llama la atención de los pesquisas es que vivían con su madre, que hace tiempo dejó de ser vista en el barrio. Realizaron una inspección en la casa y no la encontraron.
El hallazgo se produjo cuando vecinos de la vivienda situada en Lincoln 69 llamaron a la policía porque les resultaba extraño no ver movimientos en la casa donde vivían los hermanos Mario y Alberto González, de 80 y 89 años, respectivamente.
Según los vecinos, al mayor de los hermanos hacía varios meses que no lo veían, aunque el menor de ellos solía entrar y salir de la casa y hacía un par de días no se sabía de él. Por tal motivo, la policía de Wilde ingresó a la casa, donde encontró los cuerpos de ambos, sin aparentes signos de violencia.
Por orden judicial, los cuerpos fueron trasladados a la morgue y los pesquisas realizaron un relevamiento en la casa, aunque no advirtieron evidencias para sospechar que se haya tratado de muertes violentas o de que haya intervenido una tercera persona y que los hayan matado.
Un jefe policial informó que el mayor de los hermanos llevaba al menos un par de meses de fallecido, lo que hace suponer que el otro permaneció todo ese tiempo viviendo allí junto a su cuerpo.
La fiscalía de turno de Avellaneda dispuso algunas medidas de prueba para establecer lo ocurrido, para lo cual aguardaba los resultados de las autopsias y demás pruebas de rastros levantados en la vivienda.
