La jueza Sandra Arroyo Salgado afirmó este mediodía que «no» puede hacer «especulaciones» ni «conjeturas» sobre la muerte de su ex esposo y padre de sus hijas, el fiscal federal Alberto Nisman. Pero antes de ingresar a declarar dijo: “no creo que se haya suicidado”.
«No puedo hacer ningún tipo de especulaciones. Hay una investigación en curso, respetemos y dejemos que actúe la Justicia. No puedo hacer conjeturas», sostuvo la jueza cuando se le consultó si creía que Nisman se había suicidado.
Sin embargo, luego dijo, antes de ingresar, que “no creo que se haya suicidado”. Arroyo Salgado llegó alrededor de las 14 a la Fiscalía de Viviana Fein, que sigue la causa de Nisman que fue hallado muerto en su departamento, pocos días después de haber denunciado a la presidenta Cristina Fernández por «encubrimiento» en la causa AMIA.
La jueza llegó esta mañana a Buenos Aires procedente de Europa, donde estaba de viaje con sus hijas.
Arroyo Salgado fue aceptada como «querellante» en la investigación. Esa situación podría demorar la entrega del cadáver de Nisman a los familiares para permitir las exequias.
Con la representación de un abogado, la jueza de San Isidro advirtió que como la autopsia se realizó cuando ella no estaba en el país ni había asumido el rol de querellante, no pudo colocar «peritos de parte» para controlar la operación.
Ante ese escenario, la fiscal Viviana Fein y la jueza Fabiana Palmaghini podrían resolver una demora de al menos 24 horas en la entrega del cadáver a los familiares para su inhumación.
Allanaron la oficina de Nisman y realizan un procedimiento en su casa de Puerto Madero
