Se dice que la vida es una lucha y hay mucho de verdad en esto. Pero lamentablemente no se lucha con las armas adecuadas, y por eso hay demasiados fracasos. Por eso hoy vamos a ver siete armas que nos ayudan a pelear la batalla espiritual, y nos favorecerán también en el mundo material.
PRIMER ARMA:
Conocer, hablar y confesar la Palabra de Dios.
En Hebreos 4:12 leemos que la Palabra de Dios es una espada que penetra hasta lo más profundo y hace la obra de Dios ya sea para el crecimiento espiritual como para la batalla espiritual contra el mal. Necesitamos desarrollarnos como hijos de Dios para no sólo conocer la teoría de la Palabra sino principalmente la Autoridad de la Palabra de Dios. Eso nos llevará a aferrarnos a las promesas del Señor y a confesarlas en el Nombre de Jesús.
SEGUNDA ARMA:
Nuestras conversaciones deben reflejar la mentalidad de un vencedor
Proverbios 18:21 dice claramente que en nuestra lengua tenemos el poder para soltar muerte o vida. Necesitamos re-orientar nuestro vocabulario para declarar la vida y la autoridad de Cristo sobre toda fuerza del mal. Nuestro lenguaje siempre debe ser un canal donde fluya la presencia de Cristo no donde el enemigo se sienta cómodo.
TERCER ARMA:
Tomar autoridad en el Nombre de Jesús.
En Filipenses 2:9-10 leemos que Jesucristo tiene un Nombre sobre todo nombre y que ante ese Nombre toda rodilla (de nuestros enemigos espirituales) se doblará vencida reconociendo su autoridad. Esa misma autoridad está disponible para nosotros hoy, para utilizarla contra el diablo y sus demonios.
CUARTA ARMA:
Ponerse toda la armadura de Dios, (Efesios 6:13-18). O sea el casco de la salvación, la coraza de la justicia de Dios, el cinturón de la verdad, el escudo de la fe, la espada del Espíritu, el calzado de la buena noticia de la paz.
QUINTA ARMA:
Oración y ayuno. El ayuno es el “alma” de la oración, y la misericordia es la “vida” del ayuno. Cuando alguien activamente y regularmente se involucra en el lugar secreto buscando a Dios en oración diaria, debe sumar el ayuno estipulado en Isaías 58 para romper todo yugo satánico.
SEXTA ARMA:
Buscar sabiduría espiritual de parte de las autoridades espirituales de la Iglesia
Efesios 4:11. En tiempos de batallas lo peor que podemos hacer es aislarnos y quedarnos solos.
Dicen que el león para atrapar a su presa, siempre elige a aquella que se aleja de la manada. Una vez que quedo aislada la ataca y la devora.
Necesitamos aprender a quitar toda altivez, soberbia y orgullo y acercarnos a nuestros ministros para ser enseñados, porque son autoridades espirituales que ha puesto Dios en nuestra vida.
Levantémonos hoy en el Nombre del Señor para ser más que vencedores en Cristo, y ganemos todas nuestras batallas individuales y como Iglesia ¡en el Nombre de Jesús!.
Vamos arruinar las obras del enemigo, y sus planes en el Nombre de Jesús!
SEPTIMA ARMA:
Séptima arma que arruina los planes del diablo es dar alabanza a Dios por todo.
1° Tesalonicenses 5:18 Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.
Cuando viene el enemigo de nuestras almas y nos tira frases hirientes, lo mejor que podemos hacer es decir gracias Señor, decile: te alabo con todo mi corazón! y da por seguro que va a arruinar los planes malignos. Ahora si por cualquier evento o circunstancia te pones a quejar, te desanimas, y el maligno logrará su cometido. Dios te ayudará a arruinar todos los planes del maligno en este año! Creélo y utiliza las siete armas para lograrlo. Que tengas una excelente y bendecida semana!
Pastor Guillermo Decena, Centro Familiar Cristiano Eldorado.
Prédicas en vivo los miércoles y domingos 20 horas, a través de www.centrofamiliarcristanoweb.org
