Las Cataratas del Iguazú en pólvora explotada, una obra de 13 metros por 3
Cai Guo-Qiang es uno de los artistas más significativos de la actualidad. Nació en China y vive en Nueva York. Hace sus obras con pólvora explotada. Por primera vez expone en Argentina. Presenta una muestra inspirada en las Cataratas del Iguazú, otros paisajes del país y el tango.
Meditativo, sensible y exigente, el artista chino aseguró que “Si tuviera que elegir un lugar de la Argentina, serían las Cataratas del Iguazú. Me pregunto de dónde viene y adónde va tanta agua, en la tierra, en la atmósfera. De dónde sale”, reflexiona asombrado Cai. Y sus ojos se abren como los de un niño maravillado: un artista curioso, que no para de descubrir el mundo siempre por primera vez.
La Fundación Proa presentó por primera vez en la Argentina, IMPROMPTU, la exhibición ideada en nuestro país por Cai Guo-Qiang. Considerado uno de los artistas más significativos en la actualidad, nacido en Quanzhou, China en 1957, se traslada a Japón en 1986 y reside en Nueva York desde 1995.
La exhibición presenta paisajes a gran escala realizados en pólvora sobre papel con sus impresiones de visitas a Misiones y a Salta, una serie de pinturas con pólvora que reúnen elementos inspirados por distintas fuentes: la fauna argentina, el tango y los retablos religiosos del sur de Europa; además el artista ha creado una instalación hecha en cerámica que se suspende en el espacio aéreo de la librería.
En la muestra se aprecia un gigantesco trabajo, -de alrededor de 13 metros de largo por 3 de alto-, inspirado en las Cataratas del Iguazú (“Agua Grande”).
Cai Guo-Qiang utiliza la técnica de la pólvora explotada. Distribuye distintos tipos de pólvora alrededor de formas recortadas, sobre papeles o bastidores puestos en posición horizontal, los cubre con otra superficie, y luego los prende fuego. El dibujo final queda decidido por el fuego, el humo y el accidente.
Además de las Cataratas, se inspiró en los animales de Misiones, a partir de las artesanías de madera típicas de Misiones.
Dotado de una increíble versatilidad y creatividad tanto en el uso de los materiales, como también en la magnitud y escala de su trabajos, el artista ha elegido el título IMPROMPTU (improvisación), para reflejar un enfoque aproximado al de la música y coreografía que pudo observar en el tango, como también en otros aspectos de la vida cultural de nuestro país. Luego de dos viajes exploratorios, uno de ellos a Cataratas del Iguazú, concibió IMPROMPTU para las cuatro salas de Proa, el espacio aéreo de la librería y un “proyecto de explosión” con fuegos artificiales inspirado en el tango.
Pólvora para el arte
Las obras creadas in-situ para la muestra, fueron realizadas con la asistencia de grupos de estudiantes de la Universidad Nacional de las Artes (UNA) y del Instituto Municipal de Cerámica de Avellaneda, durante una semana. Ante la vista del público, el artista compartió su proceso de construcción de la obra y su azaroso resultado. Este método artístico abierto acoge la participación de los voluntarios como otro elemento creativo de la obra. El proceso ante el publico se convierte en si mismo un diálogo entre culturas donde el artista dirige un “acontecimiento” como si fuese un maestro de la escena, esta actividad tiene en si mismo una naturaleza IMPROMPTU dado el carácter impredecible de los elementos que se integran.
