Carvallo sigue prófugo y es un misterio cómo se enteró que vendrían por él

La última vez que lo vieron en Misiones, Carlos Carvallo estaba tranquilo. Fue a ver el partido que Crucero del Norte perdió ante Huracán de Parque Patricios, en Santa Inés. Charló distendido con algunos colegas y no mostraba signos de que algo le preocupara. Pero el panorama cambió al día siguiente. Al parecer avisó o mandó avisar en su trabajo (una FM de Villa Cabello) que iba a viajar y desapareció. Hasta este domingo, el locutor seguía en condición de prófugo, luego de que el juez Federal de Paraná, Leandro Ríos, ordenara su detención en una causa que investiga los delitos de lesa humanidad ocurridos en esa provincia durante la última dictadura militar.

carlos carvallo

Todo hace suponer a los investigadores que el buscado fue alertado de que se venía una orden de arresto en su contra. Es más, su repentina partida se dio mucho antes de que el juzgado Federal de Posadas, a cargo de la subrogante Verónica Skanata, recibiera el exhorto con la orden de su par entrerriano.
¿Quién le alertó a Carvallo de que vendrían por él? Es un dato que desvela a quienes lo están rastreando. Evidentemente era alguien que manejaba buena información.
Además de las distintas fuerzas federales, también fue alertada Interpol, desde mediados de la semana pasada, ante las fuertes sospechas de que el locutor ya dejó la provincia y que estaría oculto en Brasil.
Alfredo Hoffman, periodista del diario Uno de Paraná, contó que en 2012 Carvallo fue llamado a indagatoria por el mismo juez Ríos. El magistrado lo indagó y después de escucharlo lo liberó por falta de mérito. Ya ese año, se conoció que el hombre habría sido “Agente de Reunión” y “personal de civil de Inteligencia que prestó servicios entre 1976 y 1983” para el Batallón 601 del Ejército. Sin embargo, a partir del juicio que ahora lleva adelante el juez para determinar lo que sucedió en el llamado “Área Paraná”, hubo testimonios que apuntaron al locutor como activo integrante de un grupo de tareas de la Policía entrerriana y le endilgan secuestros y torturas. La acusación más contundente es la del ex dirigente de ATE Manuel Ramat, quien asegura que fue el copiloto de Alfredo Abrazian en el “Show de los Impactos” el policía que lo secuestró y atormentó durante los días en que estuvo detenido.
El viernes, casi una semana después de que el buscado fue visto por última vez, Gendarmería Nacional allanó la casa de Carvallo en Garupá y la librería que sería de su propiedad. No encontraron ni rastros.

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