Robo en el Shopping de Posadas: buscan a un VW Suran gris oscuro y al hombre misterioso que lo dejó el domingo en el estacionamiento

Para los investigadores de la Policía provincial y la Justicia los responsables del robo en la oficina administrativa del Shopping de Posadas fueron una combinación de delincuentes especializados en aperturas de caja fuerte llegados desde afuera de Misiones y ladrones locales que aportaron información y logística. Por estas horas, si bien aún no hay detenidos, los detectives han avanzado bastante en el análisis de las imágenes de las cámaras de seguridad de los alrededores del edificio y de algunos negocios del interior del predio, que alcanzaron a tomar los movimientos de los criminales.
El golpe delictivo en el centro de compras de Bolívar y San Lorenzo duró una hora y media. A las 2 del lunes, los asaltantes redujeron a sereno Juan Mareco (58) y a las 3.30, ya se estaban yendo con el dinero: 150 mil pesos y 20 mil dólares.
Los pesquisas buscan un VW Suran gris oscuro, el rodado en el que escapó la banda, luego de abrir manualmente el acceso al estacionamiento del Shopping. Fuentes cercanas al caso confiaron que ese auto entró a la cochera el domingo a las 19. Estaba al mando de un hombre joven, quien tras dejar el vehículo estacionado, bajó al sector de locales. Cinco horas después, esta persona se acercó de nuevo a la cochera y preguntó si podía dejar el auto toda la noche allí, porque pensaba pasar la noche en la casa de su novia, que, según él, vivía cercas. Le dijeron que sí. Además, le precisaron que a las 2 de la mañana el estacionamiento se cerraba totalmente. Este dato es clave, porque apenas llegó esa hora, los autores del atraco empezaron a actuar.
De ese misterioso muchacho no volvió a saberse. Pero quienes lo vieron ya aportaron su descripción física.
Una de las hipótesis indica que los ladrones entraron en ese auto y esperaron allí u ocultos en otro sector a que llegara la hora indicada.

 

Una vez que maniataron a Mareco con cintas de embalaje y lo encerraron en el baúl de un auto, los malvivientes encapuchados inutilizaron las cámaras de seguridad de la oficina administrativa del Shopping y luego violentaron la caja fuerte con sopletes.
Tuvieron precisión quirúrgica para abrir el cofre. Sus movimientos fueron tomados por cámaras de algunos locales. Sin embargo, las imágenes no serían de buena calidad, salvo una, donde se vería parte del rostro de uno de los malvivientes, que en determinado momento se relajó y se corrió parcialmente la capucha.
Los peritos de la Policía no pudieron levantar huellas aptas para el cotejo en el escenario del golpe. Solo dieron con un guante abandonado.
Ahora, los detectives intercambian datos con policías de otras provincias, tratando de encontrar patrones de accionar comunes, a fin de saber si en los últimos tiempos hubo un atraco similar en otro distrito del país.
Un dato no dejaron pasar por alto los investigadores: las perforaciones que dejaron los asaltantes en el cofre del Shopping son muy parecidas a las que hicieron en la caja de seguridad del local Musas de la calle San Lorenzo, de donde ladrones todavía desconocidos se llevaron un millón de pesos en joyas, el pasado septiembre.
La Dirección de Investigaciones Complejas y la Secretaría de Apoyo para las Investigaciones Complejas trabajan en el caso, con la supervisión del juez de Instrucción 7, Carlos Giménez.

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