El municipio de Capão do Cipó, a unos 400 kilómetros de Misiones, sufrió los azotes de una feroz tormenta que arrasó todo a su paso. El viento, con velocidades superiores a los 100 kilómetros por hora dejó un rastro de destrucción en toda la zona. Los municipios más afectados, son Unistalda y Capão do Cipó, que siguen sin luz, agua y teléfono desde el domingo. Más de 100 postes cayeron en los dos municipios y en algunas localidades, el trabajo puede demorar una semana.
El temporal en la madrugada del domingo duró pocos minutos, pero fueron suficientes para dejar las ciudades sin energía y numerosos árboles caídos. Por suerte no hubo que lamentar víctimas.
