La empresa será administrada por los propios trabajadores que conformaron una cooperativa a tal efecto. Ya cuentan con matrícula y número de CUIT. La Provincia gestiona un subsidio para solventar la compra de insumos para reiniciar las actividades. Aseguran que hay demanda asegurada.
Trabajadores que se hicieron cargo del Frigorífico el Zaimán, participaron de actividades de capacitación con el objetivo de prepararse para el nuevo rol de empresarios que les tocará asumir en la reactivación de la planta, cerrada desde 2012. Según explicó la ministra de Acción Cooperativa, Mutual, Comercio e Integración de la Provincia, Fabiola Bianco, el proceso de recuperación de la planta está en su etapa final: los operarios ya lograron conformar la cooperativa y consiguieron la matrícula del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) y solo queda obtener algunas autorizaciones para terminar con la parte burocrática.
Advirtió que para volver al ruedo, los trabajadores necesitarán invertir en máquinas, ya que el propietario anterior de la empresa se llevó todo lo que pudo antes de cerrarla, y comprar una serie de insumos imprescindibles para volver a operar. La ayuda vendrá a través de un subsidio de un millón de pesos que se comprometió a aportar el Gobierno provincial, una vez que ese dinero esté disponible, volverán a levantarse las persianas del abandonado frigorífico.
“Estamos muy cerca de que se convierta en realidad la recuperación de esta empresa que supo ser un símbolo. Atentos a eso seguimos asistiendo a los trabajadores como lo hicimos durante todo el proceso, desde que surgieron los primeros conflictos con la empresa que luego abandonó la operación de la planta, después con la conformación de la cooperativa de los trabajadores y ahora los estamos capacitando para que puedan hacer el cambio de chip necesario para convertirse en los responsables del funcionamiento del frigorífico, que entiendan que su responsabilidad ya no se limitará a hacer su trabajo, sino a administrar, comprar, vender, buscar clientes”, detalló Bianco.
La funcionaria destacó el respaldo que tienen los trabajadores por parte del sindicato de que los nuclea, entidad que les está brindando asistencia técnica, no solo en cuestiones referidas al funcionamiento en sí del frigorífico, sino también en la búsqueda de proveedores y clientes.
Bianco consideró además que la demanda para el nuevo frigorífico El Zaimán está asegurada a partir del crecimiento que experimentó la actividad ganadera en el Sur de Misiones y la falta de establecimientos similares en la zona.
Dos años y medio de inactividad
Los primeros despidos en el Frigorífico El Zaimán se produjeron a fines de 2011, en noviembre y diciembre de ese año se sucedieron protestas, que incluyeron cortes de ruta, no solo por los despidos sino también por retrasos en los pagos de los salarios y porque supuestamente los dueños estaban vaciando la planta.
La situación se agravó en enero de 2012, cuando directamente la empresa dejó de pagar los salarios e informaba a sus empleados que no tenía interés en continuar operando el frigorífico y bajó las persianas.
Los trabajadores comenzaron entonces un largo camino para recuperar la planta, camino que en pocos días llegaría a su fin.
