Al Chacal de Villa Cabello le dictarían la prisión preventiva en las próximas horas

Fuentes del caso indicaron que hay indicios suficientes para que espere entre rejas la hora del juicio oral. Está acusado de “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y privación ilegítima de la libertad agravada”. Su hija dijo que la violó durante 23 años.

Héctor Boo (57), alias “El Chacal de Villa Cabello”, está a un paso de la prisión preventiva. Es decir, para los investigadores habría elementos de peso para que espere entre rejas la realización del juicio oral. La medida sería dictada en las próximas horas.
El hombre está acusado de haber maltratado, atormentado y violado durante 23 años a su hija, quien quedó con graves secuelas físicas y psicológicas.
Boo hasta el momento prefirió mantener el silencio. Se abstuvo de declarar cuando lo citaron a indagatoria.
Fuentes del caso adelantaron que hay indicios suficientes para dictarle la prisión preventiva por “abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo y privación ilegítima de la libertad agravada”.
Quien sí compareció fue la víctima, Mirta (35), quien fue sometida a exámenes físicos y psicológicos. Fuentes cercanas al caso confiaron que en los estudios se confirmó que la mujer presenta una lesión cerebral, cuya gravedad será determinada con otros chequeos. También sufre otras complicaciones debido a las violaciones y la falta de alimentación adecuada que padeció por largos años.
Mirta es tratada por psicólogos y nutricionistas. Subió algo de peso, pero está lejos de los kilos que debería tener a su edad. Cada semana aparecen más misioneros solidarios que le aportan ropa, comida y medicamentos. De todos modos, los abogados que la asisten se mostraron preocupados por la fragilidad de su salud.
La víctima se constituyó en querellante en la causa. Y lo primero que pidió fue que sean citados en calidad de testigos ocho vecinos de la chacra 149 que pueden aportar información acerca del estado en el que vivía esa persona. Entre ellos se encuentra Nélida Dutra, quien vive un piso arriba del departamento de Mirta y quien la rescató del Chacal y se transformó en su cuidadora.
El pedido de testimoniales fue aceptado por el Juzgado de Instrucción Uno, que está realizando los trámites pertinentes para determinar los días de las declaraciones.

Historia de terror
Boo, al que también conocen con el apodo de “Chinoco”, se dedicaba a la pesca de subsistencia en la franja del río que iba desde la zona de El Laurel hasta las inmediaciones del anfiteatro Manuel Antonio Ramírez. Como vivía cerca de la costa, fue indemnizado por la Entidad Nacional Yacyretá y abandonó la ribera. Estuvo en pareja y hace 35 años se convirtió en papá de Mirta Noemí. Pero el hombre apenas vivió con su mujer e hija dos años. Por los maltratos, su concubina lo abandonó y la nena quedó al cuidado de la abuela paterna.
Mirta Noemí se crió con la abuela. Tuvo una vida normal en la chacra 149 de Villa Cabello hasta que cumplió 12 años, cuando su papá empezó a vivir en el mismo departamento que ella. La mujer declaró en el juzgado que durante 23 años, el papá la violó de manera reiterada, le impidió salir de la casa y la humilló cada día de su vida.
El lunes 21 de julio, Mirta fue rescatada por su vecina Nélida Dutra, quien llamó al 911. Fue luego de que escuchara que Chinoco quería agredir a su hija. El hombre terminó preso por violencia doméstica. Al día siguiente Mirta se quebró y contó el resto de la historia. Entonces Héctor Boo dejó de lado el apodo de Chinoco para ser conocido como el Chacal de Villa Cabello.

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