Misiones es considerada una de las provincias modelo en la temática del tratamiento y asistencia a las víctimas del delito de trata de personas y explotación sexual infantil. En el último juicio celebrado en Santiago del Estero la víctima, una misionera, declaró en Cámara Gessel con el objetivo de preservarla y no exponerla ante sus explotadores.
La subsecretaria de Igualdad de Oportunidades, Norma Sawiczs junto a la dirigente de la Coalición Alto a la Trata, Claudia Lascano, y Olga Sosa –Directora de Participación y Liderazgo destacaron el trabajo realizado en la tierra colorada para seguir apuntalando la asistencia integral y la lucha contra el delito.
Así, confirmaron que al servicio articulado que se brinda desde el Estado la justicia comienza a mejorar los procesos judiciales y una muestra de ello fue lo que pasó en el primer juicio por trata de personas que se realizó hace dos semanas en Santiago del Estero.
Durante el juicio, la víctima- una misionera oriunda de Colonia Oasis – declaró a través de la Cámara Gesell -una habitación acondicionada para permitir la observación externa- acompañada por las profesionales del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento a las Personas Damnificadas por el Delito de Trata que funciona bajo la órbita del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Fue la primera vez que una psicóloga del equipo tomó testimonio a una víctima durante un juicio oral y público a través de este dispositivo judicial.
Sobre este hecho puntual, la doctora Zaida Gatti – Coordinadora del programa nacional de lucha contra la trata de personas del Ministerio de Justicia de la Nación explicó que “en general, el equipo de psicólogas del Programa de Rescate interviene en la etapa de instrucción de las causas. “Es inédito que se tome en un juicio oral. Implica un cuidado especial porque se hace en un recinto diferente, la víctima no tiene contacto con los imputados. La Cámara Gesell está en otro edificio”, explicó
El proceso de recurar la dignidad
A las 35 mujeres que hoy perciben la beca del Estado misionero mediante la cual pueden finalizar sus estudios, aprender oficios y así poco a poco salir adelante y volver a empezar, se sumarán otras en los próximos días ni bien se finalicen con cuestiones administrativas.
“A la casa refugio donde se trabaja con el equipo técnico y las cuidadoras, más los profesionales de Salud Pública se hace un proceso articulado resguardando la parte física como psicológica, que se suma a las becas. Se trata de una ayuda por 6 meses consecutivos, a lo que se agregan talleres en escuelas de adultos, siempre tratando de incluirlas en el sistema educativo y así poder sortear ese efecto de lo vivido y dejar su estado de vulnerabilidad. Hoy en la provincia son 35 las que ya la cobraron y esta semana otras más. En muchos casos el proceso es complejo porque están sin documentos y primero se realiza un juicio de filiación”, explicó Norma Sawiczs.
En tanto Claudia Lazcano de la Coalición Alto a la Trata contó que muy pronto en el refugio el refugio “Mburucuyá” para niñas y adolescentes víctimas de explotación de sexual, se pondrá en marcha. “Se albergará a ocho jóvenes víctimas de trata y explotación sexual. Allí serán asistidas con la contención y el confort necesario con el objetivo de reinsertarlas socialmente. Para ello, habrá un equipo interdisciplinario en la institución, buscando la reparación psicológica. Los profesionales atenderán y trabajarán a través de las problemáticas particulares de cada una de ellas. Mientras que, un segundo grupo hará foco en el reconocimiento social”. Se trata de personas no recibidas por las propias familias o sus comunidades. No solo son rechazadas a través de los estigmas sociales, sino también por intermedio de estigmas físicos. “Es por ello, que el eje principal es recuperarlas y que logren reconstruir sus vidas y puedan decidir qué hacer con ella. Vamos a estar acompañando ese proceso”.
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