Los policías negaron que lavaron el móvil: dijeron que sólo tiraron agua para “reanimar” a Guirula

Accedieron a participar de la reconstrucción nueve de los once imputados. La oficial Tabárez, un colega de la comisaría XIII y un efectivo del Comando aparecen como los más complicados.

La reconstrucción del crimen del albañil Carlos Raúl Guirula (30) terminó a las 4 y dejó algunos elementos importantes para los investigadores. Por ejemplo: los policías imputados que aceptaron participar de la diligencia aportaron más detalles de lo que sucedió la madrugada del homicidio. Claro, dieron su versión de los hechos y apuntaron unos a otros a la hora de repartir responsabilidades. En este escenario, aparecen como los más comprometidos la oficial Lourdes Beatriz Tabárez, un colega suyo de la comisaría XIII y un efectivo del Comando Radioeléctrico.
Con estos indicios, más los informes de distintas pericias que aún no remitieron al juzgado de Instrucción Uno, de Marcelo Cardozo, tiene el camino casi allanado para determinar los roles que tuvieron cada uno de los acusados y, eventualmente, decidir su situación procesal. Hasta el momento, de los once imputados, solo dos fueron excarcelados. Son los que están acusados de encubrimiento.
Fuentes judiciales indicaron que 7 de los 9 uniformados presos participaron de la reconstrucción tanto en el motel Park, de Santa Catalina y Andresito y, en la comisaría XIII. En la seccional, se sumaron a la diligencia los dos efectivos que fueron excarcelados en su momento.
Aparte del relato de Victoriano Dos Santos, uno de los amigos de Guirula, quien detalló cómo fue la detención del albañil, fue determinante el relato de una de las mucamas. Ella aseguró que al joven lo golpearon “la mujer policía” (Tabárez) y otro “grandote”. Añadió que al menos otros tres miraban y no hacían nada. Sobre la oficial añadió, incluso, que le aplicó patadas en la cabeza al albañil.
También dio detalles de la paliza el encargado de seguridad del albergue transitorio. El hombre dijo que a la víctima la castigaron brutalmente y luego la esposaron, ya en el estacionamiento del motel.
Con el mismo despliegue de seguridad, los imputados fueron llevados al barrio Guazupí, donde siguió segunda parte de la reconstrucción, en la seccional XIII. Allí los uniformados detallaron todos los movimientos que hicieron una vez que llegaron con Guirula (ya muerto) a bordo del patrullero.
Los policías negaron que hayan lavado la camioneta para borrar las manchas de sangre. Dijeron que tiraron agua con baldes para reanimar al albañil, que ya no presentaba signos vitales.
Durante su intervención, cada uno de los policías imputados que accedieron a declarar en la diligencia se desligó del homicidio y apuntó a sus colegas. “Se mandaron al frente entre ellos”, sintetizó un investigador.
El jueves declararán en el juzgado de Cardozo los médicos forenses que llevaron adelante la autopsia de Guirula. La audiencia estaba prevista para el lunes pero se suspendió y se hará pasado mañana.
El albañil murió por los golpes que sufrió tras ser demorado por la Policía la madrugada del 19 de julio en un motel tras un incidente menor con el conserje del albergue transitorio.

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