Masacre en Panambí: el “datero” y el que se quedó con la plata, las piezas faltantes que desvelan a los investigadores

Dicen que el que “entregó” a los Knack conocía a la perfección los movimientos comerciales de la familia, porque la información que tenían los ladrones era muy certera. Es largo el listado de posibles sospechosos. Trascendió que ya está en Misiones el informe de comunicaciones entrantes y salientes de los tres imputados. Hay expectativas en los elementos que aportará el entrecruzamiento.

La jueza Alba Kunzmann de Gauchat está analizando la declaración que prestó esta semana Cristian Knack (25), el único sobreviviente de la Masacre de Panambí. Recién después decidirá qué medidas tomará. En paralelo, los detectives que trabajan en el caso desde la primera hora están abocados a determinar dos actores clave que ellos consideran aún son un enigma: quién se quedó con el dinero que le robaron a la familia de madereros el 25 de mayo pasado y quién aportó la información acerca del dinero que las víctimas habían cobrado por una transacción comercial.
El listado de posibles sospechosos es largo, pero no hay ningún indicio concreto. Por eso es importante el entrecruzamiento de las llamadas telefónicas que hicieron los tres imputados que tiene la causa. El informe de las empresas que prestan el servicio de telefonía ya está en Misiones. Lo que se viene ahora “es una tarea ‘artesanal’ que lleva días. Pero creo que nos aportará elementos importantes”, confiaron los informantes.
Los detectives consultados indicaron que quienes encabezan la investigación coinciden en que el “datero” tenía acceso a información acerca de las ventas que llevaban adelante los Knack. Añadió que no pasan por alto que los homicidas de Carlos Knack, de su esposa Graciela y de la pequeña Bianca, hija del matrimonio, sabían perfectamente que en la casa ese día había un monto importante de dinero. La información que contaban era muy precisa.
“Ahora debemos ser cautos y avanzar con cuidado, porque el abanico de posibilidades es amplio. Por eso sería imprudente e irresponsable dar nombres o salir a practicar una caza de brujas”, añadieron los informantes.
La investigación, tal como informó Misiones Online hace unas horas, se focaliza en la Zona Centro, pero no se vislumbra de manera inminente ninguna detención.
Mientras tanto, por el juzgado de Instrucción Uno de Oberá siguen desfilando testigos aportados por las partes y no se descarta que en las próximas horas alguno de los imputados (Marcial Alegre, Juan Ramón Godoy y el ex prefecturiano Pablo Julio Paz) pida ser indagado.
La Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional Dos, la División Homicidios y el plantel completo de la Secretaría de Apoyo paras las Investigaciones Complejas (14 empleados judiciales) trabajan en el caso.

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