La familia de Lucía Maidana ahora es querellante: dice que quiere dejar de enterarse de las novedades del caso por los medios

“Queremos estar encima de la investigación y sugerir cosas”, indicó Felicitas, hermana de la víctima. Roxana Rivas es la abogada designada por los parientes de la estudiante asesinada el 6 de abril de 2013.

lucia 2

La familia de Lucía Maidana (23), la estudiante de Comunicación Social asesinada el 6 de abril de 2013 en el departamento que alquilaba en Posadas, se convirtió en querellante. Está representada en la causa por la abogada Roxana Rivas. “Hasta entonces nos enterábamos de las novedades del expediente por los medios y la verdad queremos saber con certeza cómo marcha la investigación y sugerir cosas”, confió en una comunicación con Misiones Online Felicitas, la hermana de la víctima y una de las principales impulsoras del reclamo para que el femicidio no quede impune.
La joven, quien volvió a instalarse en su Capioví natal, aprovechó la ocasión para rechazar una versión mediática que indicaba que los investigadores habían puesto la mira en el entorno familiar más cercano de la universitaria en busca del asesino. “De eso no hay nada en el expediente. La propia gente del Juzgado me convocó para aclararlo. Con la abogada hemos hablado mucho del tema y lo que queremos pedir es más prudencia, porque se dicen muchas cosas que no son ciertas y eso lastima a la familia”, sostuvo.
Rivas acordó con la familia Maidana analizar a fondo el expediente iniciado por el crimen y consensuar el pedido de las medidas de prueba que hagan falta. “Nosotros estamos lejos, por lo que se nos tornaba complicado estar sobre la investigación. Además, nos enterábamos por los medios cuando había algo y eso no puede ser. Ahora aprovechamos la figura del querellante para estar presentes”, añadió.
Felicitas destacó el apoyo que recibe su familia de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la UNAM. También reiteró a aquellas personas que hayan visto algo la noche en que ocurrió el asesinato que no tengan miedo en aportar la información. Apeló, en ese sentido, a los vecinos del barrio El Palomar, donde se encontraba la pieza de alquiler en la que residía Lucía (Estado de Israel 3495). “Hasta ahora los que fueron a declarar dijeron que no vieron nada, pero creo que alguno tal vez omita algo, un detalle, una imagen. Todo sirve para encaminar la investigación”.
Aparte de golpear a Lucía, el homicida le prendió fuego al cuarto, con la intención de borrar todo vestigio de prueba. Por eso, en un principio se pensó que era un incendio común. Tampoco se descarta que el ataque sexual previo al asesinato.
Hasta el momento, solo un estudiante de Antropología estuvo preso por el hecho, pero su ADN no coincidió con el levantado en el escenario del hecho y lo excarcelaron.
Pese a que el homicida estuvo un buen tiempo en el departamento, nadie lo vio. Su rostro sigue siendo un enigma. Por eso los Maidana impulsan que el ritmo investigativo no decaiga. Saben que el tiempo que pasa es un enemigo implacable.

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas