Hay preocupación en la Cuenca Cañera por la demora en el inicio de la zafra

Tenía que haber empezado a mediados de mayo y estiman que entre mediados de junio y julio recién estará en marcha. Hablan de desorganización y falta de previsión en el Ingenio Azucarero.

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En la denominada Cuenca Cañera, conformada por los municipios de San Javier, Mojón Grande, Concepción de la Sierra, Arroyo del Medio, Santa María, Gobernador López, Itacaruaré, Dos Arroyos, Ameghino, Los Helechos y Panambí, hay entre 1.700 y 2.000 hectáreas sembradas con caña de azúcar. La cosecha tenía que haber comenzado a mediados de mayo, pero aún no arrancó y entre los productores, intendentes y otros eslabones de la cadena productiva hay mucha preocupación.
El principal malestar tiene que ver con las condiciones climáticas. La inminente llegada de un frío más intenso pone en peligro a los sembradíos, sobre todo a los que se encuentran en las zonas bajas. Las bajas temperaturas queman las hojas y las pérdidas son inexorables. Y si encima se producen lluvias copiosas, toda la producción corre riesgo.
“Hay alrededor de 20 días de atraso y tenemos información de que el Ingenio Azucarero de San Javier todavía no está en condiciones de recibir la producción. Con esta demora, el productor corre muchos riesgos. Puede perder la caña, la dulzura del producto”, le dijo a Misiones Online el intendente de Mojón Grande, Jorge Prichoda. En su comuna se concentra casi el 35% de las hectáreas sembradas.
Precisó que generalmente la zafra arranca en mayo, pero que año tras año es la misma historia, en cuanto a la falta de previsión. “Ya en noviembre, una vez que termina la cosecha tenemos que sentarnos a planificar la del año siguiente, así se llega en tiempo y forma. No puede ser que la cosecha tenga que esperar la puesta a punto de la planta. Tiene que ser el ingenio el que en óptimas condiciones aguarde la llegada de la producción”, opinó el alcalde.
Según Prichoda, el malestar es generalizado entre todos los intendentes de la Cuenca. “Pasa que acá pierden todos, el productor, el cosechero, los transportistas y los municipios, ya que es impresionante el movimiento que genera la zafra”.
Admitió que los productores les exigen respuestas a los jefes comunales, “cuando nosotros somos gestores, prestadores de servicios. En nuestro caso, ayudamos reparando caminos, abriendo otros que conducen a nuevos cañaverales. También acercando semillas a quienes quieren innovar en su producción o iniciarse en ella. Por ejemplo, ahora vamos a acercar a los agricultores las variedades Tucumana 7742 y LCP”.
El intendente de Mojón apuntó a los responsables del Ingenio. Pidió a las autoridades pertinentes que “coloquen gente responsable en lugares tan específicos como ese”. Habló de desorganización y falta de previsión. También exigió una comunicación más fluida con los que dirigen la fábrica y sus superiores directos.

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“Hay que tener en cuenta que la producción cañera se subsidia en un alto porcentaje. Es decir, que nos cuesta mucho a todos los misioneros. Nuestros productores no dicen ‘para qué quiere que plante, si después el ingenio no arranca’. En muchos de ellos la incertidumbre es muy grande”, reconoció.
En 2013, 137 productores vendieron su cosecha en el ingenio. En 2014, creen que ese número se estirará hasta los 150, aproximadamente. De acuerdo con Prichoda, “hay que ganarse la confianza del productor”.
“Lo que se quiere también es que una vez que arranque la molienda, no pare. Para esto hay que tener las condiciones técnicas óptimas. Y otra cosa, todavía no se habló del precio. El año pasado, la tonelada de caña convencional se pagó 322 pesos. Y la orgánica se colocó en 354”, remató Prichoda.
Los intendentes de la Cuenca ya le manifestaron su preocupación tanto al Ministro del Agro, Néstor Ortega, y el titular del IFAI, Ricardo Maciel.

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