Robo de los 400 mil pesos: el jornalero declaró siete horas y volvió a apuntar contra el abogado Leiva

Raúl Benítez evocó detalles del asalto ocurrido la semana pasada y añadió que varias veces el letrado le dijo esa mañana que podía ser asaltado.

Raúl Benítez (28) tiene miedo. “¿Cómo sé que vos sos periodista? ¿Cómo puedo comprobarlo’”, es lo primero que dice cuando se lo contacta al teléfono. Después de lo que le pasó es lógico. Se trata del jornalero al que una dupla de ladrones le robó los 400 mil pesos que había cobrado por una indemnización laboral. Hoy declaró por alrededor de siete horas en el juzgado de Instrucción a cargo de Ricardo Balor. Volvió a apuntar sus sospechas contra el abogado Nelson Leiva (35), el único detenido que tiene la causa hasta el momento.
Ante el magistrado hizo un pormenorizado relato de todas las acciones que realizó la mañana del pasado miércoles, cuando vino a Posadas desde Dos de Mayo para cobrar el dinero.
“Estuve en el juzgado hasta las 15.30 más o menos. Volví a contar todo lo que vivimos con mi mujer. Y las sospechas que tengo contra el abogado. Me preguntaron una y otra vez y detallé que desde un primer momento hubo cosas que me parecieron raras”, le confió Benítez a Misiones Online mientras viajaba hacia su pueblo.
El jornalero mencionó, por ejemplo, que en determinado momento Leiva le dijo “vamos a hacer el trámite para que quede claro que vos y yo ya no tenemos más nada que ver, por si te asaltan o algo así”.
“Varias veces me dijo cosas ‘por si me asaltaban o algo’. Después salió con eso de que yo le había pagado demás sus honorarios y que debíamos contar de nuevo la plata. Eso ahora sostiene todavía más mis sospechas”, añadió Benítez, quien reiteró varias veces su pedido a la Justicia para que determine quiénes fueron los responsables del robo que lo dejó con las manos vacías.
La víctima volvió a contar que los ladrones en ningún momento se fijaron siquiera en Leiva, que todo el tiempo lo apuntaron a él y que fueron puntualmente a buscar la mochila en la que había guardado los 400 mil pesos.
“En la calle había gente que vio lo que pasó. Había varios parados en la vereda cuando salí corriendo pidiendo auxilio”, añadió, descartando una de las versiones que había circulado el fin de semana: que nadie alcanzó a ver la escena del atraco.
“Con él (por el abogado) no volví a hablar. Lo vimos por última vez cuando fuimos a la comisaría (Sexta) a declarar. Ya en ese lugar nosotros contamos que para nosotros él tenía algo que ver”, remató.
Ahora espera en Dos de Mayo, la localidad donde tenía previsto empezar un emprendimiento con el dinero que ni siquiera pudo disfrutar, alguna novedad que le devuelva la calma.

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