El hecho fue el octubre del año pasado. La raptó y se escondió en un monte, pero la Policía rescató a la pequeña sana y salva.
Silvio Vargas (57) pasó preso más de 20 años de su vida por haber cometido un homicidio y también un robo a mano armada. Purgó su condena en la provincia y apenas salió se radicó en Oberá. El año pasado, raptó a una nena de seis años y cuando la Policía lo rodeó, se refugió en un monte. Finalmente lo atraparon. Ahora, por este caso, irá a juicio el próximo 11 de junio. De ser hallado culpable, le espera una pena de entre 5 y 15 años de cárcel.
El ex convicto será enjuiciado por el Tribunal Penal Uno de la Capital del Monte, que está integrado por los camaristas Francisco Aguirre, Lilia Avendaño y José Pablo Rivero. Está procesado por el delito de sustracción de menor, tipificado en el artículo 146 del Código Penal Argentino.
Vargas es considerado un delincuente peligroso. En octubre del año pasado, en el barrio Villa Gunther de Oberá, habría intentado abusar de una nena de diez años, hija de una pariente suya. Esto le valió que lo echaran de la cada donde habitaba. El 13 del mismo, mes, por la noche y en el mismo vecindario, cometió el hecho que lo llevó nuevamente a prisión. Estaba ingiriendo bebidas alcohólicas con unos conocidos, cuando de repente se levantó y capturó a una nena de seis años que jugaba con unos amiguitos cerca de donde se desarrollaba la ronda de tragos. Los gritos de terror de los demás niños hicieron que la madre de la pequeña raptada se enterara y avisara a la Policía.
Al sentirse acorralado por los uniformados, le tapó la boca a la chiquita para que no gritara y se metió en un monte. Entonces se temió lo peor. Recién a las 5.30 del día siguiente, hubo noticias. El criminal fue reducido por los policías y se supo que la nena estaba sana y salva.
Vargas volverá al banquillo de los acusados, a menos que se acoja a un juicio abreviado. Sea como fuera, todo indica que lo espera nuevamente una larga estadía en la cárcel.
