Finalmente, Rodrigo Mora ya dejó Tandil para viajar rumbo a Chile. En plena práctica matutina dio las hurras y se fue a la U, por un préstamo de 100.000 dólares y una opción de compra de 1.750.000 euros por el 50% del pase. Con esto se terminó la novela entre el Uruguayo y Ramón, quien no lo iba a tener en cuenta.
Sus compañeros ya trabajaban en el campo cuando, de repente, se vio bajar por una de las laderas del búnker de River a un auto de los grandes, con vidrios polarizados y con rumbo desconocido. Ya dejaba de ser rumor para convertirse en certeza, en información. Rodrigo Mora se iba de River. Se iba rumbo a Santiago. La Universidad de Chile será, por un semestre, su nueva casa. El aMora se había acabado… Desde hacía rato.
Finalmente la ida de Rodrigo Mora se concretó. Luego de un semestre en el que no tuvo demasiado rodaje en River y con una relación sin vuelta atrás con Ramón Díaz, el pase a la U de Chile se hizo realidad: las partes aceptaron y Mora dijo chau. El delantero se presentó al entrenamiento, despidió a sus compañeros y al cuerpo técnico y se retiró inmediatamente del predio de Tandil, en el auto de un empresario amigo en un completo silencio y con mucho misterio.
La Universidad de Chile se quedará con Mora por seis meses, por un préstamo de 100 mil dólares y con una opción de compra por 1.750.000 euros por la mitad del pase. Fueron 44 partidos en el Millo y siete goles. Fue, por unos minutos, el gran verdugo de Boca, la gran esperanza que nunca llegó. Fue de mayor a menor. Lo último, un gol a Ferrocarril Sud, en Tandil. Un gol más de pretemporada. Y no mucho más. Se fue. El charrúa cumplió con su deseos de alejarse de River y tendrá nuevos desafíos en tierras trasandinas. Al menos, por seis meses. O mientras en River esté Ramón.
