Pedro López Vinader, presidente de Apicofom
Otras voces empresarias se sumaron al informe especial de ArgentinaForestal.com, tras cumplirse 10 años de la aprobación de la venta de los activos forestales de la ex Pecom Forestal (Pecom Energía) a la empresa Alto Paraná SA, del Grupo Arauco de Chile, el pasado diciembre de 2013. El presidente de la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones y NE de Corrientes, Pedro López Vinader y Christian Lamiaux, directivo de la entidad y secretario de Faima, coincidieron con sus colegas de Amayadap respecto a los cambios que se generó en el mercado tras la operación: concentración económica y dificultades en la disponibilidad de la materia prima para las Pymes industriales de la provincia. «Pero como Pymes y como sector hemos madurado, nos hemos adaptado a nuestra realidad y tenemos que entender que hay que trabajar en una estrategia comercial para ganar mercado y hacer frente a la oferta y la demanda», aseveró Vinader.
Ing. Christian Lamiaux, secretario de FAIMA
Otras voces empresarias se sumaron al informe especial de ArgentinaForestal.com, tras cumplirse 10 años de la aprobación de la venta de los activos forestales de la ex Pecom Forestal (Pecom Energía) a la empresa Alto Paraná SA, del Grupo Arauco de Chile, el pasado diciembre de 2013.
La Comisión Nacional determinó que la venta se encuadraba en el marco legal de la ley 25.156 de Defensa de la Competencia, descartando que «tras la fusión, se genere en el mercado concentración o posición dominante por parte del grupo inversor», cuando ésta fue la principal preocupación denunciada por las Pymes madereras de Misiones. Alto Paraná adquirió así, con una inversión de más de 43 millones de dólares, una superficie de 60 mil hectáreas en forestaciones, 20 mil de ellas correspondientes a la reserva de bosque nativo, 27 mil implantadas y tres mil a forestar. Además del aserradero (era el segundo más importante en Misiones y del país, justamente después del aserradero Piray de APSA), con una capacidad de 100 mil metros cúbicos de producción anual, ubicado en Puerto Bossetti (en el límite entre Puerto Libertad e Iguazú), y un huerto semillero.
El presidente de la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones y NE de Corrientes, Pedro López Vinader y Christian Lamiaux, directivo de la entidad y secretario de la Federación Argentina de la Industria de la Madera y Afines (Faima), coincidieron con sus colegas de Amayadap respecto a los cambios que se generó en el mercado tras la operación: concentración económica y dificultades en la disponibilidad de la materia prima para las Pymes industriales de la provincia.
Pero López Vinader se diferenció en su análisis con respecto a la posible posición dominante de Alto Paraná en el mercado interno como fijadora de precios. “No sé si es tan así, en este sentido entiendo que se trata de una cuestión de oferta y demanda. Todos tenemos que hacer frente al escenario que se nos presenta en el mercado. Por ejemplo, este año hubo un alto consumo en el mercado de la construcción. Con los planes Procrear se trabajó estratégicamente en el banco que la promoción de este programa lleve la imagen de una estructura y techo de madera, y un aserradero. Es decir, todo lo que haga para fomentar el mayor consumo de la madera suma”, expresó.
Agregó que “hay mucho de estrategia comercial en esto de ganar mercado. Eso lo tenemos que entender como Pymes y como sector. Y cabe aclarar que en lo personal, yo no estaba de acuerdo con la venta de Pecom, fui uno de los primeros que lo denuncié ante la CNDC. Allí estuvimos Apicofom, Stuart Navajas y Vinader rechazando esta operación. Nosotros nunca hubiésemos acordado nada, este negocio no lo hubiéramos permitido, pero fueron las empresas de Amayadap las que decidieron acordaron en aquel momento y cerrar ese compromiso voluntario”, recordó.
De todas maneras, había que dar una vuelta de página y hacer frente al nuevo escenario. “El tiempo pasó, se enfrentaron los cambios y el sector ha madurado. Hoy las relaciones que mantenemos tanto con Amayadap como con Alto Paraná están muy bien, y todos estamos haciendo frente a las complejidades del mercado”, dijo.
La realidad es que la compra de Arauco frenó la posibilidad de llegada de otros grandes inversores forestales en la zona Norte. “Hoy es muy difícil pensar en una nueva industria. La zona quedó muy acotada tras la operación de venta de Pecom. Algunos propietarios de aserraderos comenzaron a plantar y otros se fueron a Corrientes. Y este es otro tema, ya que hay razones reales que hacen que sea más competitivo instalarse en Corrientes”, admitió López Vinader.
Explicó que los factores que determinan estas ventajas no tienen que ver solamente con la presión fiscal. “El valor de la materia prima y el flete es tan alto en Misiones, que conviene tener la industria forestal en Corrientes. Se trata de una cuestión de fondo la que estoy planteando. La realidad es que la materia prima se nos aleja, en la zona Norte está a un valor por arriba de los costos”, afirmó.
Y en este sentido, ejemplificó que la empresa Bosques del Plata vende en la actualidad a un precio promedio de 23 dólares la tonelada de rollo sobre camión, un pino joven. A un cálculo por 6,30 pesos por dólar, a cotización del día, son 144 pesos promedio. “Ese mismo rollo, en pie, vale 170 pesos en la zona Norte de Misiones. Creo que es muy claro donde conviene poner la industria. Por lo tanto, remarco que más que lo que impositivo, la realidad es que la materia prima es lo que hace más atractivo instalar una industria forestal en corrientes”, indicó el actual presidente de Apicofom.
La contracara, es que hoy en Misiones tiene la mano de obra más calificada del país. “La calidad industrial del operario maderero misionero es muy superior a la de otras provincias, muy superior. Igualmente la infraestructura de la provincia, es muy superior a otras provincias. Por eso, quienes ya tenemos la industria instalada en Misiones y la infraestructura, todavía se queda”, reflexionó.
Mercado, concentración y competencia
Por su parte, para el empresario y dirigente forestal, Christian Lamiaux, la “foto del momento de la operación cambió a 10 años de la venta” y los temores que representaba esta inversión al momento de decidirse la operación, se concretaron en parte, pero otros temores no. “La realidad es que la venta de Pecom al Grupo Arauco le facilitó imponer mucho más firme su actividad dominante, acaparando la segunda mayor industrias de madera aserrada de la provincia. La verdad es que la inmovilización que se produjo de innumerable cantidad de propiedades en mano de APSA generó una situación de oferta centralizada. La zona Norte esta muy atada a esa oferta, y la balancea con la compra de rollos en Corrientes, lo cual a simple viste demuestra mayor costo”, explicó.
“En aquella oportunidad, nosotros ya considerábamos que esta operación de concentración de empresas no seria positiva, y hoy vemos que esto finalmente se profundizó. Alto Paraná tiene estas características de concentración, pero las Pymes nos estamos adaptando a este cambio y tenemos hoy una buena relación con la compañía”, aseveró Lamiaux.
Distinto sería de haber tenido otro competidor funcionando el aserradero, con alguna otra industria en la zona y con la opción de contar con un patrimonio forestal de respaldo. “En la actualidad existen dos proyectos de factibilidad de instalar industrias en Misiones, pero ya no se piensa en la zona Norte, que esta dominada por la actividad de esta gran empresa. Por otra parte, la realidad de hoy esta un poco cambiada, en relación a los temores de mercado y déficit de materia, en gran parte los problemas que enfrentamos se deben a factores del mercado, esa es la verdad”, remarcó el empresario. “Aunque, de todas maneras, hay que admitir que vemos las consecuencias del dominio de la empresa, que incluso se expresa en el mercado nacional. Alto Paraná, por cuestiones entendibles del contexto de crisis del mercado internacional, en un principio, sumado a factores de competitividad interna, se ve obligada hoy a volcar su producción al mercado interno”, sostuvo el empresario de Apicofom.
Mientras que en el año 2003 se aprobó esta inversión en la provincia que incluía la compra de tierras, a 10 años de la misma, la Cámara de Diputados de Misiones comenzó en 2013 a sancionar leyes de Expropiación de tierras a la compañía chilena. Al respecto, Lamiaux consideró necesario separar la cuestión de Alto Paraná y centralizar la discusión en lo que es la propiedad privada. “Desde el sector foresto-industrial y en concepto de propiedad privada, entendemos que desde el Estado se debe ser muy cuidadoso en el manejo de este tipo de herramientas. Muchas veces, en cualquier economía y en diversas partes del mundo, esto se aplica para velar por el desarrollo de las ciudades y los aspectos sociales, pero debe ser consensuado, por todo lo que representa una expropiación, analizar los pro y los contra. Sin dudas, es una herramienta que tiene el Estado, y es mejor que estos conflictos intervenga el Estado, ante que avance la intrusión o se intensifique un conflicto social”, opinó.
Por Patricia Escobar
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